Este miércoles el Gobierno se enfrentaba a una nueva sesión de control en el Congreso de los Diputados y, como viene siendo habitual, ha estado marcada por el enfrentamiento entre el Gobierno y el principal partido de la oposición. En esta sesión ambos han elevado el tono recriminándose sus respectivos casos de corrupción desde las primeras intervenciones. Pablo Casado ha abierto el turno de preguntas pidiendo al presidente que aclarara si tiene sobre la mesa implantar “recortes” ante la crisis que experimenta España a causa de la pandemia del coronavirus. "Los únicos recortes que necesita España son los de corrupción del PP", ha respondido tajante Sánchez evitando contestar sobre los recortes económicos. 

Tras ello, ambos se han dirigido acusaciones sobre los casos que les afectan, y éstos han vuelto a salir a relucir cuando la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, se le ha preguntado al presidente si “este Gobierno tiene un compromiso real con la regeneración democrática” tras acusar el pasado viernes al jefe el Ejecutivo de tapar “la corrupción de Podemos”. Sánchez, por su parte, se ha mostrado comprometido con la regeneración democrática y ha citado, para ello, los casos de Gürtel, Púnica y Kitchen obviando el caso Dina que afecta a su socio de Gobierno por más que Arrimadas le ha pedido que acepte investigar este caso.