Los nuevos modelos de transporte personal sostenible siguen haciéndose un hueco en la capital hispalense, y más en la movilidad post-Covid a la que aspira el Ayuntamiento. Aunque, en el caso de los vehículos de alquiler, ahora lo harán bajo una regulación municipal, frente al desembarco de varias empresas que en los últimos tiempos han generado en la ciudad problemas de convivencia con los peatones.

Hace un par de meses, el Ayuntamiento de Sevilla dio luz verde al proyecto piloto para la ordenación de los patinetes eléctricos con la aprobación de una convocatoria pública para seleccionar dos empresas, que podrán operar un máximo de mil unidades cada una. Ahora, y bajo el mismo modelo de proceso, le toca el turno a las bicicletas eléctricas.

La Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente aprobó este jueves las bases para la selección de dos empresas de alquiler de este tipo de bicis, que podrán poner a disposición de los usuarios mil vehículos como mucho cada una, es decir, 2.000 en total. Lo harán durante un periodo de 18 meses, que es lo que durará el experimento piloto que servirá para determinar el modelo definitivo a largo plazo. "Queremos comprobar la capacidad de la ciudad para asimilar ordenadamente estos nuevos modos de movilidad antes de proceder a autorizar a las posibles empresas operadoras", explicó el delegado de Hábitat Urbano, Turismo y Cultura, Antonio Muñoz.

Hasta la fecha, hay tres empresas que ya han solicitado formalmente al Consistorio desarrollar su actividad en Sevilla (Mobike, RG Electric y Jump by Uber), si bien el plazo de presentación de ofertas será de dos meses desde que el concurso se publique en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).

Entre los criterios de evaluación para la selección de las dos empresas figuran la calidad de las bicicletas eléctricas, la seguridad vial que ofrezcan los vehículos, el sistema de vigilancia del estacionamiento, el personal asignado a tareas de reubicación en caso de bicicletas mal estacionadas, la tecnología para la prevención, vigilancia y detección de los estacionamientos incorrectos en tiempo real, el porcentaje de vehículos con etiqueta 'Cero emisiones' y el porcentaje de electricidad que provenga de fuentes renovables.

Más de 300 aparcamientos

En paralelo a este proceso, Urbanismo ha elaborado un estudio para definir el mejor modelo de estacionamiento de las bicicletas eléctricas, así como la ubicación de los aparcamientos. Como resultado, el Ayuntamiento ha propuesto finalmente un total de 328 estacionamientos de ciclos de pedaleo asistido, ebici o pedelec, con una capacidad aproximada para 2.776 bicicletas en toda la ciudad.

Para ello, se ha tenido en cuenta que los nuevos estacionamientos sirvan para reforzar la infraestructura ya existente en este sentido, de manera que la mayor parte de las ubicaciones –301, el 91,77%– se instalarán junto a los aparcamientos que hay actualmente repartidos por toda la ciudad. Asimismo, se habilitarán otros parkings específicos donde no haya ahora mismo aparcabicis ni estaciones de Sevici, aunque nunca en puntos donde afecte a la movilidad peatonal.

También se tendrá en cuenta para la colocación de los estacionamientos que se encuentren en el entorno de edificios públicos, dotaciones e infraestructuras donde haya una mayor movilidad ciclista y se propicie la intermodalidad, como estaciones, universidades, hospitales o sedes administrativas.

Por último, quedará prohibido el aparcamiento de las bicis eléctricas de alquiler en los espacios de especial afección patrimonial, sobre todo en los entornos de determinados edificios declarados BIC, como el ámbito de la Catedral-Real Alcázar-Archivo de Indias, y en áreas peatonales como el eje de la avenida de la Constitución y la calle San Fernando, las áreas comerciales del centro histórico, el barrio de Santa Cruz o la calle San Jacinto.