Tras la emisión del documental de Lazos de sangre de este miércoles dedicado a la figura del piloto de motos Ángel Nieto, y donde participaron sus hijos y personas algunas personas cercanas a él, La 1 dio paso al debate.
Rocío Carrasco fue una de las participantes en dicho espacio, ya que Nieto era un gran amigo de su padre, Pedro Carrasco, y quiso recordar algunas anécdotas entre el piloto de motociclismo y el boxeador.
"Ángel ha formado parte de mi vida, de mi infancia, de mi adolescencia y de mi madurez, era como hermano de mi padre. Era un ser increíble y excepcional", afirmó la colaboradora del programa.
Pero el protagonismo no se lo llevaron sus declaraciones y recuerdos, sino su vestido y el tatuaje que la hija de Rocío Jurado lució en la espalda y que mostró al presentador del programa, Boris Izaguirre, y a los espectadores de RTVE.
"Era de mi madre y será del año 67 o 68", afirmó Rocío mientras se levantaba y enseñaba a cámara el vestido que en su momento lució la cantante. El diseño, en rayas blancas y negras, cautivó a los presentes en el plató.
Pero luego llegó el plato fuerte, la hija de Rocío Jurado se dio la vuelta y mostró el gran tatuaje que se ha dibujado en la espalda, ocupándola casi por completo: "¡Es un ave fénix, un ave fénix!", exclamó Izaguirre.
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