La llegada del buen tiempo y el calor hace que se dispare la demanda de los aires acondicionados, ya que son una buena solución para quienes tienen que soportar en casa altas temperaturas en la época de verano.
Una de las opciones a la hora de proceder a la instalación de aire acondicionado es la que implica el suministro mediante conductos, cuya característica principal es que "está compuesta por un sistema centralizado de distribución del aire a través de un falso techo que llega a todas las habitaciones", tal y como explica la Organización de Consumidores y Usuarios.
Ventajas del aire acondicionado por conductos
Desde la OCU y también desde HogarSense, especializados en aire acondicionado y calefacción, indican una serie de ventajas que tiene este tipo de aire acondicionado en comparación con otras opciones:
- Existe un ahorro de energía debido, ya que trabaja con una única unidad exterior de gran capacidad, en lugar de con varias de menor potencia.
- Se evita tener las unidades interiores instaladas en las paredes, con lo que se gana en nivel estético y de habitabilidad, ya que solo se verían pequeñas rejillas por la que se expulsa e aire.
- Permiten la zonificación, es decir, que tienen la capacidad de regular la temperatura y el flujo de aire en las habitaciones o en cada espacio de la estancia. Así, si se realiza una instalación zonificada cada habitación cuenta con un termostato propio.
- Ahorro en la factura de la luz, ya que al ser alcanzada la climatización se cierra automáticamente.
Consumo del aire acondicionado por conductos
Desde HogarSense ponen el ejemplo de una casa de unos 85 metros cuadrados, de los que se quedan unos 62 metros cuadrados climatizables, ya que el baño y la cocina no tendrán rejillas. Para esta vivienda, la potencia frigorífica recomendada sería de 600 Kcal/h, es decir, una potencia de 7 KW.
Además, dependiendo de la marca y el modelo del aire acondicionado, varía el consumo en frío entre 2 KW/h y y 2,6 KW/h.
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