De esta forma, "miles de trabajadores incrementarán las horas presenciales en las obras, aumentando al mismo tiempo su exposición al Covid-19", un hecho que CCOO "vigilará de cerca e incluso denunciará ante la Inspección de Trabajo". "Partir la jornada no solo supondrá vía libre para aquellas empresas que prolongan ilegalmente las horas de trabajo, sino que traerá otros riesgos añadidos para los trabajadores", ha señalado la secretaria general del sindicato provincial de construcción y servicios de CCOO de Sevilla, Mercedes Santoja.
"Los trabajadores deberán desarrollar sus funciones a las horas en las que las temperaturas alcanzan picos máximos y con la mascarilla puesta, lo que hará posible que aumenten otros problemas como los golpes de calor", ha añadido.
En este sentido, Santoja ha mostrado su disconformidad con la decisión tomada por Gaesco y UGT. "Si desde un primer momento, todas las partes estábamos de acuerdo en que la jornada intensiva de ocho horas era la mejor forma de prevenir el contagio, hoy, con la incidencia y la peligrosidad que el virus ha demostrado, no podemos pensar lo contrario. Máxime cuando en estos dos meses hemos constatado cómo en este sector no han podido garantizarse al 100 por cien las medidas de seguridad".
Desde CCOO de Sevilla se entiende que los únicos beneficios que trae este acuerdo bilateral en el sector es el de aumentar los que tienen las empresas, "máxime cuando en Sevilla no hay obras urgentes que exijan primar la celeridad por encima de la salud". Asimismo, se recuerda que falta menos de un mes para que se instaure la jornada intensiva, tal y como recoge el convenio del sector hasta el mes de septiembre.
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