En concreto, según ha explicado el concejal del ramo, Diego López, ya se han realizado un total de 31 y resta por ejecutar una treintena más "en zonas deterioradas con socavones o baches y agrietadas por el desgaste de la calzada debido el propio paso de los vehículos o a las inclemencias meteorológicas".

"Aunque por la situación actual algunas obras se han ralentizado, estos trabajos de emergencia se tienen que seguir llevando a cabo para garantizar unos niveles de seguridad máximos", ha subrayado.

También el edil ha explicado, a través de un comunicado, que las reparaciones, que se enmarcan en el Plan de Conservación de Distritos, se prolongarán dos semanas y contarán con un presupuesto cercano a los 12.000 euros.

En este sentido, ha detallado que en primer lugar se identifican las zonas deterioradas para, posteriormente, planificar la intervención, que consistirá en eliminar el firme deteriorado y reponerlo con aglomerado en caliente o en frío, en el caso de que el peligro deba ser eliminado de inmediato.

En total, está previsto utilizar 270 metros cuadrados de aglomerado y ocho metros cuadrados de hormigón impreso, así como seis tapas de adecuación.

"La ideas es aprovechar el poco tránsito que existe en nuestros viales por el confinamiento de la población, facilitando de esta manera la reparación", ha apuntado, al tiempo que ha incidido en que para el equipo de gobierno "es una prioridad que los ciudadanos perciban que se sigue trabajando en la rehabilitación preventiva y el mantenimiento de los viales para garantizar unas condiciones óptimas".