La Cámara gallega quedó disuelta por la convocatoria de elecciones -ahora anulada- el pasado 11 de febrero, de manera que solo está operativa la Diputación Permanente (y la Mesa de este órgano parlamentario que está de guardia en periodos no hábiles y entre legislaturas). Lo conforman 21 parlamentarios y otros tantos suplentes, de los 75 con los que cuenta la Cámara gallega.

Aunque en este periodo entre legislaturas ya se celebró una reunión de la Diputación Permanente para tratar de forzar varias comparecencias de miembros de la Xunta por otros temas; será la de este jueves del presidente del Gobierno autonómico la primera que tenga lugar en este tiempo en que la cita con las urnas del 5 de abril quedó anulada y la legislatura 'en funciones' se alargará hasta el otoño.

La Diputación Permanente tiene, como ha reconocido en una entrevista con Europa Press el presidente de la Cámara, las funciones "limitadas", por lo que ha invitado a los grupos a ponerse de acuerdo para establecer que actividad podría acoger este órgano parlamentario.

"Si los grupos se ponen de acuerdo y acuerdan propuestas razonables, que de alguna manera pudiesen ser evaluadas y puestas en práctica por la mesa de la Diputación Permanente, no vamos a poner ningún problema. Estamos ante una situación especial", ha señalado Santalices, quien ha incidido en que, además de la disolución del hemiciclo, hay que tener en cuenta la alarma sanitaria.

"Tienen que reunirse de alguna manera y consensuar los aspectos en los que la Diputación Permanente puede operar. Lo que pido es que hagan propuestas razonables, que puedan ser bien entendidas y analizadas y corroboradas por los servicios jurídicos", ha abundado.

BUENA DISPOSICIÓN DE LOS GRUPOS

En la entrevista concedida a Europa Press, Santalices ha "agradecido" la buena disposición de los grupos parlamentarios para poder llevar a cabo esta reunión con el menor número de personas posible. "La respuesta ha sido muy colaboradora", ha incidido.

Médico de profesión, Santalices es conocido en el Parlamento y fuera de él por preocuparse por la salud de diputados, funcionarios, allegados y conocidos. De hecho, ha asegurado que parte del tiempo que pasa en su casa, siguiendo "las recomendaciones" de las autoridades de salud pública sobre el confinamiento, lo dedica a su "profesión" y a hacer seguimiento de la salud de personas cercanas (en mayor o menor medida) con y sin síntomas por coronavirus.

El jefe del Legislativo autonómico ha afirmado que está siendo "muy disciplinado" porque entiende que el mensaje que están dando las autoridades sanitarias de quedarse en casa es el necesario en este momento epidemiológico: "Tenemos que hacer caso".

"Lo importante es romper esa cadena de transmisión para que no haya contagios y la mejor manera es hacer el confinamiento. Y se lo recomiendo a todo el mundo", ha manifestado Santalices, quien ha indicado que él aprovecha su tiempo para leer, ejercicio físico y hábitos saludables, las actividades parlamentarias y "recuperar" su actividad profesional, hablando "con mucha gente", diese o no positivo.

No en vano, el presidente de la Cámara es el primero en "teletrabajar", a cuyo personal ha agradecido como han acogido las medidas establecidas en el Pazo do Hórreo. De hecho, ha mostrado su "orgullo" hacia el cuerpo de funcionarios del Parlamento de Galicia.

UN HEMICICLO SEMIVACÍO

El pleno se realizará en el hemiciclo, semivacío, y los diputados serán distribuidos tomando las distancias entre cada uno de ellos necesarias. Además, se prevé reservar la tribuna de oradores solo para el presidente de la Xunta, mientras que el resto de representantes lo harían desde sus escaños.

Ya de por sí solo estaban llamados a participar en la comparecencia de este jueves 21 diputados, incluido el presidente de la Xunta, pero está previsto que acuda la mínima representación de cada uno de los grupos, tal y como le han trasladado al propio presidente las distintas formaciones políticas.

Para Santalices, que él sea médico es también "un plus" a la hora de establecer medidas de protección, higiene y organizar las actividades. Y es que, como él mismo recuerda, el cambio en los hábitos alimenticios en la Cámara autonómica ha sido una de sus acciones más recriminadas, incluso dentro de su propio grupo, esta X legislatura que ha terminado pero que permanecerá todavía unos meses más en funciones.