Tras una alterada participación en GH VIP pese a conseguir ser la tercera finalista de la edición, la colaboradora de Sálvame Mila Ximénez ha decidido empezar una nueva vida. Desde que saliera de la casa de Guadalix de la Sierra, Mila ha reconocido estar más tranquila y ha confesado que ahora quiere disfrutar de la vida, algo que, hasta ahora, no hacía, según confirmaba su propio compañero, el presentador Jorge Javier Vázquez. Este cambio radical ha comenzado por una mudanza: la colaborada se marcha del barrio de Salamanca para vivir en un pisazo en Chamartín, de 204 m2, por cuyo alquiler pagará 2.700 euros al mes. 

El inmueble cuenta con cuatro dormitorios, piscina, dos plazas de garaje y hasta un portero las 24 horas del día. Un piso lleno de comodidades que podría devolverle la felicidad a la colaboradora al disfrutarlo en compañía de su hija Alba y sus nietos. Fue la propia Mila la que se encargó de supervisar la mudanza y de recibir a los operarios que tuvo que contratar para trasladar sus múltiples pertenencias en camiones. 

Así, el año 2020 parece ir de pisazos en el programa de Mediaset ya que hace unos días, Kiko Hernández ponía a la venta su exclusivo piso en el barrio de Trafalgar.

Un vecindario muy popular

La colaboradora ha decidido comenzar su nueva vida en Chamartín, una de las mejores zonas de la capital y, también, de las más elitistas: allí viven, según publica la revista Lecturas, personalidades como Marta Ortega, Florentino Pérez, Simeone, José Bono o la Infanta Margarita, con quienes Mila Ximénez compartirá vecindario.

Según el citado medio, la heredera de Inditex adquirió, en 2017, un apartamento de 500 m2, en el mismo edificio en el que Simeone, el entrenador del Atlético de Madrid, compró su vivienda. Por su parte, el expresidente del Gobierno, Felipe González, vive con su pareja en una casa de la zona de más de 400 m2, mientras que el político José Bono adquirió una vivienda de 300m2 en el barrio, tras su separación de Ana Rodríguez.