La detención se produjo después de que un perito técnico especialista autorizado de la marca en cuestión se trasladara a Gran Canaria ante la sospecha de que sus productos se estuvieran comercializando sin autorización o que pudieran ser falsos, según informó la Guardia Civil en nota de prensa.
Posteriormente, los agentes de la PAFIF al recibir esta información, realizaron una serie de inspecciones en ciertos locales y almacenes, interviniendo uno de ellos en el Polígono Industrial de El Sebadal, desde donde se vendían productos supuestamente falsos al por mayor a varias empresas nacionales ubicadas en Gran Canaria.
Así, con el asesoramiento técnico del mencionado perito y su correspondiente informe pericial, la PAFIF intervino 930 accesorios de telefonía móvil que simulaban ser de la marca, por lo que se detuvo al dueño del negocio como presunto autor de un delito contra la propiedad intelectual, al no disponer de la preceptiva autorización de la marca en cuestión para comercializar con sus productos.
Finalmente, el investigado y los 930 accesorios intervenidos han quedado a disposición del correspondiente Juzgado, en funciones de guardia, de Las Palmas de Gran Canaria.
La Guardia Civil expone que la Oficina de propiedad intelectual de la Unión Europea (EUIPO), en el año 2016, fijó el volumen del comercio internacional de productos falsificados y pirateados en unos 509.000 millones de dólares estadounidenses, que en euros supone unos 460.000 millones, lo que representa hasta un 3,3 por ciento del comercio mundial.
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