En rueda de prensa posterior a la firma del acuerdo, el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, aseguró que esta subida es la mayor de los últimos doce años.

El alza se desglosa de la siguiente manera: el 2% en consonancia con la subida del IPC en 2006 y el 1,1% restante para que las pagas extraordinarias incorporen el 100% del complemento de destino -ahora sólo se abona el 60%-.

Cuando los empleados públicos (personal laboral y funcionarios) cobren en diciembre de 2006 su paga extraordinaria, ya tendrán incorporado el complemento de destino al 100%, lo que elevará la subida acordada hoy al 3,4%.

Además, el incremento salarial del 3,1% acordado podrá ser mejorado por las tres administraciones en las mesas de negociación que abran con los sindicatos.

En el caso de la Administración General del Estado, Sevilla y los representantes de CCOO, UGT, CSI-CSIF y SAP han acordado que en septiembre negociarán el complemento por productividad, así como la dotación al Fondo de pensiones complementario -que habitualmente equivale al 0,5% de la masa salarial de los cerca de 500.000 empleados públicos que existen-.

Para Sevilla hoy es un día "importante" para los 2,5 millones de trabajadores públicos de las tres administraciones, ya que se "rompe" con la línea seguida en los últimos años de pérdida de poder adquisitivo por parte de este colectivos.

Sevilla destacó asimismo que el haber "cerrado" el acuerdo salarial permite "abrir" la puerta a otros para mejorar la Función Pública. Al respecto, indicó que su Ministerio se ha comprometido hoy con los cuatro sindicatos firmantes -US0 no se ha sumado- a negociar el Estatuto para el Empleado Público, acordar medidas para conciliar la vida laboral y familiar, reducir la temporalidad por debajo de "dos dígitos" -ahora está alrededor del 32%- y negociar el Plan de Rejuvenecimiento de la Administración, que supondría la jubilación anticipada de unos 25.000 empleados públicos del Estado.

Preguntado por ese plan de modernización de la Administración, recordó que se ha constituido un grupo de trabajo con el Ministerio de Economía y Hacienda para ver qué figuras se pueden mejorar o qué nuevas se pueden introducir para permitir esas jubilaciones anticipadas y a qué colectivos podrían ir dirigidas.

Respecto al futuro decreto para conciliar la vida laboral y familiar, Sevilla reconoció que "esta vez la Administración se ha estirado" al recopilar las mejores prácticas de las empresas privadas, lo que le ha permitido "ir más allá", por lo que dijo esperar un buen acuerdo en la materia.

Tras la rueda de prensa del ministro, el secretario general de la Federación de Servicios Públicos de UGT, Julio Lacuerda, expresó la "satisfacción" de su sindicato por el acuerdo retributivo logrado. Por parte de CCOO, María José Alende valoró el compromiso de reducir la temporalidad, en cuatro años, en las administraciones públicas al 10% y el que el Plan de Rejuvenecimiento se vaya a discutir con los sindicatos.

En nombre de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-CISF) Angel Lozano calificó el acuerdo de "bueno" y aplaudió el que el Gobierno haya dado un "paso adelante" en la "homogeneización" de las condiciones salariales de los empleados públicos de las tres administraciones.

Finalmente, José Naharro, del Sindicato de la Administración Pública (SAP), reconoció estar "sorprendido gratamente por el esfuerzo económico realizado por la Administración".

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