Según indican desde la institución académica asturiana en nota de prensa, este premio reconoce como excepcionales las contribuciones de la científica en su trabajo en el CMS, uno de los detectores del Gran Colisionador de Hadrones del CERN dedicado a la toma de datos de las colisiones de protones y el estudio de las partículas fundamentales.

Los galardones son concedidos cada año por 3.000 miembros de la colaboración CMS y distingue a personal científico e ingenieros e ingenieras que realicen contribuciones excepcionales para el experimento.

Bárbara Álvarez trabaja en el entendimiento de la materia y el origen del universo y en particular en cómo el bosón de Higgs (descubierto en 2012) se relaciona con otras partículas fundamentales para así llegar a comprender sus propiedades y su labor principal en el modelo estándar de la Física de Partículas.

En la entrega de premios se destacó su contribución al entendimiento del comportamiento esperado de una parte fundamental del detector (las cámaras de muones) para la fase de Alta Luminosidad del LHC (HL-LHC) cuya puesta en marcha está prevista para 2024.

Así, el Grupo de Física Experimental de Altas Energías del ICTEA ve reconocido su trabajo continuado de investigación en el CERN y en el experimento CMS durante los últimos 20 años. Este premio se produce en una línea de investigación, la participación en el desarrollo de instrumentación en Física de Partículas, a la que el grupo se ha incorporado recientemente.

El grupo ha sido galardonado con un segundo premio en la edición de 2019. Al respecto, la Universidad de Oviedo incide en que "solo otra institución, el CERN, tiene tantos premios". Sergio Sánchez Cruz recogerá el galardón en una segunda ceremonia que tendrá lugar a finales de marzo.