Al menos seis personas han resultado afectadas de gravedad por el gas lacrimógeno lanzado por efectivos de la seguridad de la Embajada estadounidense en Bagdad contra los manifestantes concentrados ante la sede para protestar por los recientes bombardeos contra una milicia paramilitar.

"Los manifestantes han quemado neumáticos frente a la Embajada estadounidense en Bagdad y las fuerzas americanas respondieron lanzando botes de gas desde el interior de la Embajada", ha explicado una fuente de las fuerzas de seguridad iraquíes en declaraciones a la televisión iraquí Al Sumaria. "Como consecuencia, seis manifestantes han sufrido ahogamiento", ha reseñado la portavoz.

La agrupación armada iraquí Multitud Popular, integrada principalmente por milicias chiíes, pidió este miércoles a sus simpatizantes y miembros que se retiren de las cercanías de la Embajada de Estados Unidos en Bagdad, donde permanecen una parte de los que ayer asaltaron la legación.

En un comunicado publicado en su página web oficial, la Multitud Popular instó a "las masas" a que se retiren, "por respeto a la decisión del Gobierno iraquí que así lo ordenó y para preservar el prestigio del Estado".

Asimismo, aseguró a sus partidarios que "su mensaje ha llegado", en referencia a su rechazo al ataque estadounidense contra posiciones de las milicias en el oeste de Irak el domingo, en el que la Multitud Popular aseguró que murieron 25 combatientes.

Asimismo, apoyó las declaraciones del comandante de las Fuerzas Armadas y primer ministro iraquí, Adel Abdelmahdi, que prometió el martes que cualquier ataque a las embajadas y representaciones extranjeras será evitado y castigado de forma severa.

La noche del martes el primer ministro dimisionario habló por teléfono con el presidente estadounidense, Donald Trump, quien le recordó la "necesidad de proteger al personal e instalaciones estadounidenses en Irak".

Trump acusó a Irán de "orquestar" el asalto a la legación estadounidense, porque vincula a Teherán con las milicias chiíes y las responsabiliza de los frecuentes ataques con proyectiles contra bases e instalaciones con presencia estadounidense en suelo iraquí. Irán lo ha negado rotundamente.

Este mismo miércoles el secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, ha anunciado el inmediato despliegue de 750 soldados en respuesta a las protestas contra la Embajada estadounidense en Bagdad.