La mujer, de 46 años, está acusada de un delito de hurto y presuntamente había vendido las joyas robadas en una casa de compra-venta de València.

La Policía abrió la investigación tras tener conocimiento de que el hijo de la víctima se había percatado de la ausencia de diversas joyas del domicilio de su madre.

La víctima había tenido a dos mujeres cuidando de ella, ya que había sido operada y para moverse necesitaba ayuda. Continuando con las investigaciones, los policías averiguaron que una de las cuidadoras había realizado la venta de una joya en una casa de compra-venta en València durante las fechas en las que había trabajado en el domicilio.

Los agentes averiguaron que la joya vendida era propiedad de la víctima y que el valor de las joyas sustraídas ascendía a unos 1.200 euros.

Los agentes averiguaron la identidad de la sospechosa que, tras presentarse en dependencias policiales, fue detenida. La mujer, sin antecedentes policiales, tras ser oída en declaración fue puesta en libertad, no sin antes ser advertida de la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando fuese requerida.