Durante un desayuno de trabajo con los medios informativos vascos, el presidente del Ejecutivo autónomo aludió al futuro pronunciamiento de los jueces sobre la constitucionalidad de la iniciativa y se manifestó "absolutamente convencido" de que el Tribunal Constitucional se pronunciará a favor de la consulta. "No he conocido ningún argumento jurídico ni político serio que nos haya dicho por qué no puede ser consultada la ciudadanía".

El pasado mes de julio el Gobierno vasco solicitó al TC que realizara su pronunciamiento sobre la constitucionalidad de la consulta antes del 15 de septiembre, fecha prevista para su convocatoria.

¿Y si el fallo fuera negativo?

Preguntado por las distintas posturas que mantienen los socios del Ejecutivo ante un posible fallo negativo, Ibarretxe se limitó a recordar que PNV, EB, EA y Aralar, presentaron "de forma conjunta" las posiciones de defensa al recurso interpuesto por el Gobierno central y seguirán defendiendo de forma conjunta "el derecho a ser consultado".

El lehendakari calificó esta iniciativa política de "hecho histórico" y avanzó que los cuatro partidos seguirán "defendiendo conjuntamente el derecho a decidir de Euskadi en España, Europa y el mundo".

"En los próximos meses, viviremos el debate en Europa, no sólo sobre el derecho vasco, sino también sobre el de otros pueblos. Podemos ser capaces de ubicar en la agenda de Europa la capacidad del pueblo vasco para ser consultado", dijo. En este sentido, resaltó que esta cuestión "no sólo afecta al pueblo vasco, sino también al conjunto de pueblos en Europa".

Por otro lado, Ibarretxe, ha eludido este martes expresar su opinión sobre la intención del PP de proponer una movilización en apoyo al Tren de Alta Velocidad y ha emplazado a los "populares" a plantear la propuesta a los partidos. El lehendakari ha hecho estas declaraciones durante un encuentro informativo con medios de comunicación en el Palacio de Ajuria Enea, donde ha hecho un repaso de la actualidad política.

En el turno de preguntas ha sido interpelado sobre la intención del PP de sondear la opinión de PNV y PSE en septiembre en torno a la posibilidad de convocar una manifestación conjunta en apoyo al Tren de Alta Velocidad, amenazado por ETA.