El director de cine Quentin Tarantino, autor de películas como Pulp Fiction o Jackie Brown, ha llegado a Berlín, donde el 13 de septiembre comenzará el rodaje de su polémico próximo film, cuyo título provisional es 'Inglorious Bastards' [Bastardos ignominiosos], como informa The Guardian.

La película, un remake de una producción de la década de los 70, promete ser un baño de sangre nazi, lo que ha levantado ya las primeras críticas en Alemania. "Los efectos de la colisión entre la violencia tarantiniana y la barbarie nazi puede ser impredecible", han dicho Tobias Kniebe, crítico de cine del diario Suddeutsche Zeitung.

Según el guión previo difundido por el director, la película promete ser descabelladamente violenta. En la arenga inicial, el protagonista, teniente Raine (Brad Pitt) grita: "Todo hombre que esté bajo mi mando me debe cien cabelleras de nazis arrancadas de las cabezas de cien nazis muertos, o morir en el intento".

Tras esto, una sucesión de escenas donde se arrancan cabelleras, se graban esvásticas en la frente, se dispara a los testículos o se estrangula lentamente. Y así, hasta no dejar ningún resquicio a la pedagogía anti-bélica. Pues, como ha asegurado el director norteamericano, su película "no tratará en absoluto sobre la guerra, y, mucho menos aún, sobre Alemania".