Según una nota de prensa de la Comandancia de Gijón, en la primera ocasión, a resultas de la maniobra, provocó un accidente con cuatro vehículos implicados que al frenar para evitar colisión frontal con él, colisionaron entre sí.

Asimismo, en las dos ocasiones, el conductor, al percatarse de su error, realizó un cambio de sentido en la misma autovía para continuar su camino en el sentido correcto de la misma.

Los hechos se produjeron sobre las 21.00 horas de este pasado domingo, cuando la Central Operativa de la Guardia Civil Tráfico de Asturias recibía varias llamadas alertando de la incorporación de un vehículo en la autovía AS-1 (Gijón-Mieres) en sentido contrario.

El error del conductor provocó un accidente entre cuatro vehículos que circulaban en esos momentos por la Autovía, al intentar evadir la colisión frontal con el recién incorporado, resultando delmismo cinco personas heridas de carácter leve.

El vehículo infractor al percatarse de su error, modificó el sentido de la marcha, continuando en sentido a Gijón. Dos horas más tarde, la Guardia civil recibía de nuevo una alerta similar,en la que se comunicaba la presencia de otro vehículo circulando ensentido contrario por la AS-I, a la altura del kilómetro 20, constatándose de que se trataba del mismo vehículo.

En esta ocasión, el vehículo infractor se había incorporado en la salida de Siero, que está situada en el kilómetro 14 de dicha Autovía, e iba circulando sentido Gijón cuando lo debía hacer sentido Mieres.

Inmediatamente, la Guardia Civil activó un dispositivo procediendo a cortar la circulación en la citada autovía, a la altura de Gijón (km. 33), evitándose así riesgo de una nueva colisión.

Esto le permitió circular sin tráfico hasta la altura de Mareo, donde de nuevo repetía la maniobra efectuada en la primera ocasión realizando un cambio de sentido para continuar su marcha en el sentido correcto hacia Mieres.

Agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civillograron interceptarlo a las 22.35 horas, en la salida de Bendición (km.19). El conductor, J.L.A.A., de 83 años y nacido en Asturias ya ha sido identificado y se encuentra siendo investigado por la Guardia Civil, cuyos agentes le imputaron un delito contra la seguridad vial tras la inmovilización del vehículo, realizando por otra parte propuesta extraordinaria para la revisión de aptitudes psicofísicas del permiso de conducción.