Zapatero, que visitó la zona en la que se originó el incendio tras regresar esta misma mañana de su viaje oficial a China, explicó que el próximo martes de reunirá en la Moncloa con los alcaldes de los municipios afectados y responsables de la Diputación Provincial y de la Comunidad Autónoma.

Con ellos abordará el plan de ayudas para la recuperación e incentivación económica de la zona y paliar los efectos, tanto sociales como medioambientales.

Peticiones: profesionalización y más prevención

Desde el mismo lugar en el que se originó el incendio en una barbacoa, en las inmediaciones de la Cueva de los Casares, el jefe del Ejecutivo escuchó de los integrantes de los retenes sus peticiones de una mayor profesionalización de los equipos e incrementar las tareas de prevención, incluso en invierno.

Después de agradecerles el "gran esfuerzo" que se desarrollaron para intentar que no se extendiera el fuego, Zapatero aseguró que sus peticiones "no caerán en saco roto", aunque recordó que la competencia sobre estos equipos forestales corresponde a las comunidades autónomas.

Aumento de medios aéreos

En cuanto a la dotación de medios que dependen directamente del Gobierno central, Zapatero destacó que han aumentado notablemente los medios aéreos de que disponen los equipos de rescate, pero aseguró que el Ejecutivo está dispuesto a incrementar el número de aviones, especialmente aquellos que pueden actuar por la noche, ya que se trata de unas horas que pueden "resultar decisivas".

Insistió en que el Ejecutivo tiene la obligación de volcarse con esta zona y sus habitantes, "muchos de ellos -dijo- indignados y dolidos y a los que hay que comprender perfectamente".

El jefe del Ejecutivo estuvo durante casi hora y media comentando con los retenes y los técnicos forestales las circunstancias del incendio, junto a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, quien comentó con ellos la necesidad de que esta tragedia sirva, al menos, de lección para todo el país.