A su término, Zapatero ha ratificado su apuesta por las energías renovables, que calificó como "la energía del futuro", frente a la nuclear. "España no puede perder el futuro, vamos a estar en esa alta tecnología, en una política avanzada y Dinamarca es un gran referente para nosotros", manifestó en rueda de prensa junto al primer ministro danés, Anders Fogh Rasmussen.

Tras visitar el parque eólico marino de Middelgrunden, el presidente explicó que la administración española estudia en estos momentos unos 30 proyectos de parques eólicos en el mar.

Asimismo, adelantó que en otoño viajará a Copenhague el ministro de Industria, Miguel Sebastián, para conocer esas instalaciones eólicas marinas. En España éstas son inexistentes porque el turismo, el tráfico marítimo, la actividad pesquera y la abrupta caída de la plataforma continental a poca distancia de la costa dificultan la instalación de las turbinas.

No obstante, según las cifras del Ministerio de Medio Ambiente, la generación eléctrica de origen renovable superó el año pasado, por vez primera, a la de origen nuclear. De hecho, el 19,8% de la producción eléctrica correspondió a energías renovables y el 17,7% a las centrales nucleares.

Lejos de Kyoto

España recortó un 1,7% sus emisiones de CO2 en 2006, a pesar de lo cual sigue siendo el país más alejado de los objetivos del Protocolo de Kyoto contra el cambio climático, según los datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente a mediados de este mes.

Todas estas decisiones se enmarcan dentro de las propuestas de Zapatero, que en su programa electoral anunciaba que daría "máxima prioridad" al cumplimiento de "los compromisos de España en el marco del Protocolo de Kyoto, apostando por las energías renovables".