Dos corresponsales de la BBC han muerto este fin de semana, uno en Afganistán y otro en Somalia, y ambos a causa de disparos de arma de fuego.

El corresponsal de la BBC Naster Dahir fue asesinado a balazos el sábado cuando regresaba a su domicilio en la ciudad de Kismayo, en el sur de Somalia, informó la cadena británica. Dahir, de 26 años, recibió varios disparos en el pecho y en el estómago por un hombre armado cuando regresaba a su casa en Kismayo, a 500 kilómetros al sur de Mogadiscio.

El periodista somalí fue trasladado a un hospital de la ciudad en estado de coma, donde poco después murió.

Por otro lado, el corresponsal afgano de la BBC en la provincia de Helmand (sur de Afganistán), que había sido secuestrado el sábado, fue hallado muerto este domingo por disparos en la cabeza, informó la cadena pública británica.

El cadáver de Abdul Samad Rohani, que colaboraba con la delegación de la BBC en Kabul y era el corresponsal en pashtún del Servicio Mundial, fue descubierto en la zona de Lashkar Gah, indicó la emisora.

En un comunicado, la BBC destacó "el coraje y dedicación" de Rohani, que fueron "clave para la información de la cadena desde Afganistán en los últimos años".

Amenazas de muerte

La Unión Nacional de Periodistas Somalíes (NUSOJ), de la que el corresponsal somalí Dahir era vicepresidente, señaló que el infortunado había recibido amenazas de muerte. Por su parte, la organización de Reporteros sin Fronteras en un comunicado expresó su profunda repulsa por este asesinato.

Somalia, sumida en el caos y en la violencia desde 1991, es uno de los países del mundo más peligrosos para la prensa, Al menos nueve periodistas has sido asesinados en el país desde febrero de 2007, de acuerdo a la organización humanitaria Amnistía Internacional (AI). Según la fuente, las primeras investigaciones sobre la autoría del crimen apuntan a grupos insurgentes islamistas.