Este miércoles se conocía que 120 personalidades del mundo del cine y la televisión abandonaban la SGAE para darse de alta en otra sociedad de gestión de derechos: DAMA. Entre ellas, algunas tan reconocidas como Pedro Almodóvar o Juan Antonio Bayona.

Pero, ¿Qué es DAMA? el acrónimo puede sonar poco familiar debido al perfil menos mediático de la sociedad en comparación con la más conocida SGAE (que se ha visto envuelta en un halo de notoriedad como resultado de los importantes conflictos en los que ha estado involucrada en los últimos años), pero DAMA no es una entidad nueva, sino que este 2019 celebra su 20 aniversario. Y precisamente, su actual presidente, Borja Cobeaga, lanzaba hoy unas afirmaciones que, en conjunto con el éxodo de creadores, ilustran bastante bien la razón de ser de la asociación: "Espero que quienes han pedido el traslado no tengan los problemas que tuve yo".

DAMA (Derechos de Autor de Medios Audiovisuales) es una entidad de gestión de derechos de autor en el ámbito español para autores audiovisuales, excluyendo así a los músicos y otros colectivos a los que sí incluye la SGAE. Nace en 1999 a raíz del desacuerdo manifestado por un grupo de directores y guionistas con la SGAE, que opinaban que sus derechos estaban siendo menospreciados en relación con los de la música, y que buscaban una gestión más transparente y efectiva tanto para ellos como para los usuarios.

Este cisma queda ejemplificado por las declaraciones que realizaba Natxo López, a Eldiario.es, que ejemplifican la diferencia de criterios respecto a la gestión del sector musical y el audiovisual en la SGAE: "De las tarifas la televisión, un 82% iba para música y un 18% para los autores audiovisuales". Ante esta situación, el sindicato de guionistas de España, ALMA, decidió lanzarse a la creación de la asociación alternativa para corregir estos defectos.

Esta vocación está muy presente en cómo se define a si misma la entidad: "Hace 20 años, un grupo de autores se propusieron cambiar las cosas". Uno de los cambios más importantes era que cada socio tuviese un voto, en lugar del sistema por recaudación propio de la SGAE.

Así, en su sitio web se definen como "una Entidad de Gestión de Derechos de Propiedad Intelectual autorizada por el Ministerio de Cultura mediante Resolución de fecha 5 de abril de 1999 (BOE 9 de abril de 1999)", "especializada en la recaudación, gestión y reparto de los derechos de autor de obras audiovisuales y cinematográficas". Según aseguran, se componen en la actualidad de 900 socios y gestionan un repertorio de más de 500.000 obras, que incluyen las de los directores y guionistas de Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Canadá, México, Argentina, Japón, Corea y 28 países más.

Una de las cuestiones que se consideraron más importantes desde la propia fundación de DAMA fue la identificación del repertorio por el que se recauda, evitando así la recaudación por repertorio de autores que no sean socios. Esta medida se toma de nuevo como reacción a las prácticas de la SGAE, que ejerce la recaudación previamente para luego distribuirla en base a otros criterios, lo que llegó a originar situaciones como la acumulación de 180 millones de euros por repertorio sin identificar, provenientes de artistas que no entraban por sistema en dichos criterios.

Este sistema permite además otra cuestion clave: la gestión personalizada de los derechos de cada socio o incluso cada obra.

Precisamente, esta era una problemática que existía y que, al menos en parte, se atajó con las licencias Creative Commons. Esta es una figura propia del marco jurídico anglosajón (aunque reconocidas, con ciertas dificultades, por el marco europeo) tenía como objetivo la 'cultura libre', permitiendo el uso de las obras con una serie de condiciones especificadas por el autor. De igual manera, el sistema de DAMA permite, por ejemplo, que un autor estipule que no se cobre por alguna de sus obras, o que se cobre bajo determinadas condiciones.

La SGAE y DAMA no son las únicas entidades de gestión de derechos que operan en España, sino que existen varias más. En su web, la propia SGAE menciona seis, varias de ellas especializadas, como el Centro Español de Derechos Reprográficos (CEDRO),  Visual, Entidad de Gestión de Artistas Plásticos (VEGAP) o la Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales (EGEDA).

También existen otras de ámbito geográfico más limitado, como EKKI, que opera en el País Vasco y que se basa en buena medida en el modelo de DAMA.