La ponencia que el PP presentará en su congreso nacional de junio vierte duras críticas contra los nacionalistas y en concreto contra el PNV. De los nacionalistas vascos dice que, aunque "condenan el terrorismo, al mismo tiempo, todos sus actos desmienten sus palabras".

"Su actitud en relación a la lucha antiterrorista es siempre obstruccionista. No se puede decir que el PNV es partidario del terrorismo de ETA, pero sí podemos afirmar que no colabora en su derrota", mantiene el PP.

La ponencia defiende además que se han roto los consensos básicos de la Transición, porque hay fuerzas políticas "empeñadas en romper los fundamentos" de la convivencia. También acusa al Gobierno socialista de "no saber o no querer saber ejercer sus responsabilidades".

El texto señala que en Cataluña y el País Vasco la autonomía constituye un punto de partida "para avanzar hacia la meta final de la independencia". También se critica la reforma del Estatuto de Cataluña. Dice que es "ajeno a la Constitución" y que plantea "relaciones inadmisibles con el Gobierno de España".

En su congreso de junio el PP presentará otra ponencia sobre estatutos en la que asume además que la sociedad española ha cambiado y que el partido debe adaptarse a ese cambio, por eso, en la ponencia se propone cambiar los estatutos para que cualquier persona pueda afiliarse (hasta ahora sólo podían hacerse del PP españoles o ciudadanos de la UE).

El partido se describe como de centro, liberal y reformista. Sus valores son "la defensa de la democracia, el mercado libre, el imperio de la ley, los derechos humanos, la separación de poderes, la libertad individual y la derrota de ETA".

La junta directiva nacional encargó la redacción de esta ponencia a la líder del PP en el País Vasco, María San Gil, al presidente del partido en Canarias, José Manuel Soria, y a la diputada por Cataluña Alicia Sánchez Camacho. Sin embargo, San Gil anunció el pasado domingo que no estaba dispuesta a firmar la redacción final del texto por discrepancias de criterio.