Cinco personas murieron este fin de semana en otros tantos casos de ahogamiento. Los sucesos tuvieron lugar en Huesca, Granada, Barcelona, Murcia y Alicante.

El primero de los casos tuvo lugar este sábado en Aragón. Un barranquista, L. F. A. T., de 54 años y de Valencia, murió ahogado en una cascada cuando descendía el barranco de Estriviella, en el Valle de Hecho (Huesca), según informó la Guardia Civil.

Sobre las 17.55 horas se recibió un aviso en la central de 062 de la Benemérita informando de que un barranquista, mientras realizaba el descenso del citado barranco en compañía de otra persona, se había quedado bloqueado en el último rapel bajo una cascada, y no podía continuar descendiendo los 18 metros que le quedaban. El agua, finalmente, provocó su ahogamiento.

Hasta el lugar acudieron especialistas de la Sección de Rescate e Intervención en Montaña (SEREIM) de Jaca, de la Unidad Aérea de Huesca y un enfermero del 061. Al llegar a la zona, en un primer vuelo no se localizó a la persona accidentada por lo que se decidió llegar a pie.

Una vez localizado lo encontraron al pie de la cascada tumbado, ya que había sido localizado antes por dos agentes del Puesto de la Guardia Civil de Huesca que se encontraban fuera de servicio haciendo el mismo descenso, habían cortado la cuerda que lo mantenía colgado sobre la cascada. Asimismo, habían intentado reanimarlo mediante maniobras RCP sin lograrlo.

Tras ser valorado por el sanitario, fue introducido en una camilla y evacuado en el helicóptero hasta la localidad de Jaca, donde fue recogido por la empresa funeraria.

Un varón de 54 años de edad fue hallado muerto en la noche de este pasado sábado en la piscina de un cortijo situado en la localidad granadina de Moclín.

En un comunicado, Emergencias 112 Andalucía precisó que el suceso se produjo sobre las 22:50 horas, cuando un familiar de la víctima lo encontró ahogado en una piscina de un cortijo de la población de Puerto Lope, según avisaron los testigos de los hechos al centro de coordinación.

Alertados por el centro coordinador, hasta el lugar se desplazaron efectivos de Policía Local, Guardia Civil y de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES), quienes tan solo pudieron certificar su fallecimiento.

Por su parte, el Instituto Armado activó el protocolo judicial para tratar de esclarecer las circunstancias del siniestro.

Un hombre de 47 años murió este domingo mientras se bañaba en la playa de la Mota de Sant Pere en Cubelles (Barcelona), informó Protección Civil en un comunicado.

El 112 recibió el aviso a las 11.25 horas, cuando un testigo informó de que habían sacado a un hombre del agua y que estaba inconsciente.

Al lugar se desplazaron un helicóptero y dos ambulancias del Sistema d'Emergències Mèdiques (Sem), dos patrullas de los Mossos d'Esquadra y efectivos de la policía local, y el personal del Sem le practicó maniobras de reanimación cardiopulmonar, aunque fueron infructuosas y el hombre murió en la playa, que no dispone de servicio de vigilancia.

Servicios sanitarios de emergencias no pudieron salvar a un varón de 77 años que falleció al sufrir un síndrome de inmersión en la playa el Castillico frente a la casa del Reloj de Santiago de la Ribera, en el término municipal de San Javier.

El 1-1-2 recibía llamadas informando del incidente a las 14.35 horas. Al lugar acudieron patrullas de Policía Local, voluntarios de Protección Civil y una Unidad Móvil de Emergencias con personal de la Gerencia de Urgencias y Emergencias Sanitarias 061.

A su llegada, informaron finalmente que, a pesar de los intentos de reanimación, el hombre falleció, por lo que solicitaron la presencia de un médico forense y la autoridad judicial.

Un hombre de 70 años murió ahogado en la playa de La Glea, en la Dehesa de Campoamor, en el municipio alicantino de Orihuela, según informó el Centro de Información y Coordinación de Urgencias de la Comunitat Valenciana.

El aviso se produjo alrededor de las 14.50 horas, y hasta la zona se desplazaron una unidad del SAMU y un soporte vital básico.

Los técnicos sanitarios que han atendido a la víctima han aplicado las habituales técnicas de reanimación cardiopulmonar, aunque sin éxito.