Comprarse un piso nunca ha sido una tarea fácil. Sin embargo, a medida que pasan los años, cada vez resulta más complicado, porque el dinero que ganamos no crece a la medida de lo que aumenta el precio de la vivienda. Ni mucho menos: el precio de los pisos ha crecido en diez años seis veces más que nuestros salarios.

En 1997, el metro cuadrado en Vizcaya costaba una media de 953 euros y el salario medio en Euskadi era de 1.769 euros brutos mensuales, según datos del Ministerio de Vivienda y del Instituto Nacional de Estadística. El año pasado, el metro cuadrado costaba 3.082 euros de media, un 223% más, mientras que el sueldo había ascendido tan sólo un 36%, hasta alcanzar los 2.035 euros al mes.

Eso sí, ambos datos se encuentran

El divorcio entre el precio de la vivienda y los salarios muestra además, según los expertos en economía, un problema social. «La pérdida de poder adquisitivo de los asalariados corre paralela a un incremento espectacular de los ingresos de aquellos cuyas rentas provienen del capital. Lo que supone que unos van para arriba y otros para abajo», asegura Juan Torres, catedrático en Economía Aplicada.

Y las hipotecas no se quedan atrás. Entre los 55.315 euros de importe medio de 1997 y los 180.793 de 2007 ha habido un aumento del 226%.

Ocurre en todo España

Vizcaya y Euskadi no son, no obstante, los únicos lugares en los que la diferencia entre la subida de los pisos y de los sueldos es tan abismal. En otras provincias, como Alicante o Málaga, el precio de las viviendas también ha crecido seis veces más que los sueldos, mientras que en otras, como Córdoba, la diferencia es mucho mayor. En esta ciudad andaluza el incremento del metro cuadrado es nueve veces mayor.

CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE BILBAO