En este equipo participan cirujanos, endocrinos, especialistas en dietética, fisioterapeutas y psiquiatras. Juntos realizan un enfoque multidisciplinar del problema que permite prestar al paciente una atención integral, según el Complejo Hospitalario de Pontevedra.

La cirugía bariátrica se realiza por laparoscopia, un método poco invasivo, en el que se realizan varios cortes muy pequeños, que permiten una recuperación más rápida y menos dolorosa que la cirugía tradicional. En la intervención se realiza una reducción de estómago o bien la exclusión de parte del intestino.

Tras la operación, el paciente debe permanecer ingresado unos cuatro días y, tras el alta, la misma unidad le marcará una dieta. Al llegar al peso adecuado, que puede suponer entre 50 y 80 kilos con respecto al peso inicial, se establece una dieta de mantenimiento más completo.

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