¿Cómo afronta la recta final de la campaña del 26-M?

Yo estoy percibiendo muchísima ilusión en todos y una cierta movilización. Pero me preocupa mucho más que no exista, que solo sea una percepción mía y que luego no se traduzca. Es importante que sigamos insistiendo en la movilización y la participación si queremos que las derechas no vuelvan a dirigir Madrid.

Supongo que ha tenido tiempo de conocer Madrid más a fondo. ¿Qué ha visto?

Nosotros estamos intentando mirar Madrid desde fuera hacia dentro, desde la perspectiva de los barrios, desde la perspectiva de los distritos. Ya sabía que no se trabajaba para los distritos de fuera de la M-30. Siempre he pensado que Madrid tiene una energía especial y una potencia tremenda pero que no llega fuera. Nosotros queremos trabajar desde fuera hacia dentro para que los barrios se parezcan mucho más, para que los distritos se parezcan mucho más a los distritos del centro. Sobre todo porque Madrid necesita igualdad y equilibrio. Creemos que Madrid será mejor cuando haya muchísima más igualdad y sostenibilidad.

¿Qué barrio le ha impresionado más de forma negativa?

Nos llaman mucho la atención los barrios en los distritos del sur pero es que los tenemos también en Barajas, como el Barrio del Aeropuerto, o en Fuencarral, como Lacoma. Y por supuesto Orcasur o algunos barrios de Puente de Vallecas. Hay un problema grande en Madrid. No podemos sentirnos orgullosos hasta que no se aumente la igualdad y todos tengan las mismas oportunidades. Me llama la atención que después de 24 años de políticas del Partido Popular vengan unos cuatro años en los que teóricamente se va a trabajar más por los barrios y se ha hecho muy poco. Madrid tiene unas urgencias. Y creo que es achacable a una falta de gestión y también incluso hasta de prioridades. Trabajamos para todos los madrileños pero la indignación nos mueve también a pensar que nuestra prioridad es trabajar para los que han estado abandonados durante años.

¿Cuáles son sus recetas para mejorar esa desigualdad en los distritos?

Lo resumo en tres cosas: la igualdad en todos los sentidos para las personas, los barrios y los distritos; la sostenibilidad porque tenemos que trabajar sobre la salud pública, por lo tanto sostenibilidad quiere decir lucha contra la contaminación constante y no solamente en el Madrid Central sino en todos los barrios y distritos; y por supuesto el desarrollo económico como consecuencia de que Madrid sea más equilibrado en todos los sentidos.

¿Su lucha contra la contaminación incluye extender Madrid Central?

El problema hay que afrontarlo globalmente. Madrid tiene que ser un ejemplo clarísimo en la lucha contra la contaminación. Los jóvenes dicen que no hay un planeta B. Nosotros decimos que no hay un Madrid B. Las cosas se solucionan actuando directamente sobre ellas. Por tanto, hay que hacer planes sobre el Medio Ambiente en cada uno de los distritos, más transporte público, más aparcamientos disuasorios, más utilización de la bicicleta, cancha para los peatones... Vamos a hacer una ciudad saludable y que sea habitable en el futuro.

La pregunta del millón. ¿Qué va a hacer para que la ciudad esté limpia de una vez?

Es uno de los problemas que más comentan los ciudadanos. Desgraciadamente recibimos una muy mala herencia. Son situaciones que se producen con unos contratos muy caros y muy descompensados. Hay que aumentar esos contratos cuando acaben en 2021 pero mientras eso ocurre hay que actuar. Contrataremos 1.000 trabajadores nuevos y pondremos en marcha un programa de limpieza intensivo para los barrios más afectados por la suciedad.

Usted define Madrid Nuevo Norte como la 'oportunidad Chamartín'. ¿Qué cambiaría si finalmente no se aprueba ahora?

Nuestra intención no es ni paralizarla ni retrasarla. Es una oportunidad para las cosas que necesita Madrid. Madrid necesita más espacios verdes y una mejor movilidad pero también mucha más vivienda. Hay unas dificultades muy grandes para alquilar por el encarecimiento de los precios. Pensamos que el porcentaje de vivienda con distinto grado de protección en la operación Chamartín, que puede ahora estar en un 20%, puede ser una oportunidad para aumentarlo hasta el 50%. Es una oportunidad para que Madrid en general se equilibre y compense las deficiencias que tiene en el aspecto de la vivienda y en otras más.

¿Contempla bajar los impuestos a los madrileños?

Creemos que no es un problema de subir o bajar los impuestos. La derecha siempre propone bajar los impuestos pero cuando han estado gobernando en el Ayuntamiento de Madrid los han subido, y encima endeudando Madrid. Está muy bien rebajar la deuda, pero que sea a costa de dejar la inversión no está bien. Se ha dejado de invertir en Madrid y los presupuestos no se cumplen. Madrid no es una ciudad que pueda permitirse dejar de invertir 900 o 1.000 millones de euros. Hay que seguir invirtiendo en Madrid. Lo que queremos es un modelo fiscal equilibrado. Hace falta gestionar mejor lo que se hace. Nosotros no vamos a subir los impuestos. Y solamente si en el proceso lo vemos oportuno se podrán ajustar a la baja algunos de los impuestos municipales que se pagan.

¿Cree que el efecto Sánchez le puede beneficiar?

Es una cuestión muy importante. Pero fíjate que en Madrid gana el PSOE en las últimas elecciones con prácticamente 500.000 votos; las izquierdas o las ideas progresistas tienen 800.00 votos; pero ojo porque las derechas, con la extrema derecha, tienen 900.000. Nosotros lo que estamos planteando son soluciones para Madrid pero también esperanzas porque queremos que Madrid siga siendo una ciudad con ideas progresistas, abiertas y no excluyentes.

El presidente le ha acompañado en actos electorales en Vallecas y Latina. ¿Le ha dado algún consejo?

Recibir el apoyo del presidente y del partido es una muy buena sensación. Siempre estoy pensando en cómo vamos a hacer nuestro trabajo porque, claro, estamos proponiendo muchas cosas pero sabemos necesitamos la fuerza de los votos para realmente transformar Madrid. Necesitamos una coordinación perfecta. Hay muchas cosas que se está pensando desde el Gobierno que también necesita Madrid como la lucha contra la pobreza infantil y otras determinaciones a nivel económico que pueden ser muy importantes para Madrid.

¿Qué valor da a las encuestas?

Para mí es un valor relativo. Son fotos fijas en un momento determinado que en muchos casos nos llevan a animarnos. Siempre estoy acostumbrado a trabajar hasta el último minuto. Ahora podemos estar contentos si las circunstancias que se nos dan en las encuestas son buenas pero satisfechos no estaremos hasta el día 26 o el 27.

La alcaldesa le ha tendido la mano en esta campaña. ¿Usted está dispuesto a cogérsela?

Tenemos muy claro que Madrid necesita de las ideas progresistas para seguir avanzando pero tambien de la gestión. Nosotros ofrecemos es un verdadero equipo. Es un equipo de un partido que lleva 140 años trabajando para todos, les voten o no les voten. Pero, por supuesto, estamos trabajando en esa línea. Tenemos que colaborar. Es muy importante que esa colaboración sea efectiva y perfecta. No hay un minuto que perder.

¿Descarta entonces un acuerdo con Ciudadanos?

Creo en el diálogo y en la puesta en común. No soy de los que va poniendo barreras ni líneas rojas como algunos. Yo a Ciudadanos todavía no le he visto en ningún caso decir que no quieren saber nada de la extrema derecha.

¿Cree que va a ser clave para la izquierda la entrada o no de Madrid en Pie en el Pleno?

Vamos a esperar los resultados de las urnas, que es una cuestión imprescindible para ver qué podemos hacer. A mí me gustaría convecer a los madrileños de que somos los que podemos concentrar también estas situaciones para trabajar para todos.

BIO: Nació en Madrid hace 61 años. Empezó Periodismo, pero abandonó la carrera por su gran pasión: el baloncesto. Como entrenador, su trayectoria ha estado vinculada fundamentalmente al Estudiantes. Con la selección, ganó un Mundial (2006) y fue subcampeón europeo (2007).