La ordenanza municipal también prevé un mecanismo para que la edificación de un solar con dichas características se pueda realizar "de manera directa".

El objetivo de la nueva ordenanza es frenar la especulación urbanística, según explicó el jueves la concejal de Urbanismo del Ayuntamiento, Aurea Soto, quien explicó que la intervención de la administración en el suelo "es una obligatoriedad por ley desde 1956".

De hecho, estas posibilidades están recogidas en la Ley del Suelo de 2002 de Galicia, pero su desarrollo no es habitual en los ayuntamientos gallegos.

El suelo "es un bien público que no se puede recuperar", por lo que "pertenece a todos y es obligación de la Administración intervenirlo, controlarlo y dirigirlo", concluyó la responsable de urbanismo.

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