El Parlamento británico rechazó este miércoles por la mínima —312 a 208 votos, solo cuatro de diferencia— la posibilidad de un brexit sin acuerdo, solo un día después de vetar el que la primera ministra Theresa May había logrado in extremis con Bruselas.

Los diputados, en concreto, respaldaron una enmienda no vinculante que excluye la posibilidad de salir sin acuerdo del bloque comunitario no solo el 29 de marzo, sino en "cualquier momento y bajo cualquier escenario". Esta enmienda, que presentó la conservadora Caroline Spelman, matiza el texto de la moción gubernamental que abogaba por descartar una salida no negociada dentro de 16 días únicamente.

Justo después, rechazaron (164-374) otra enmienda que pedía una prórroga hasta el 22 de mayo, pero con el fin de tener más tiempo para prepararse para una salida sin acuerdo.

Este movimiento aboca ahora a una nueva votación clave dentro de 24 horas: los diputados tendrán que decidir si piden a la UE una extensión del Artículo 50 del Tratado de Lisboa, es decir, una prórroga. Londres tendrá que justificar muy bien ese retraso, que los jefes de Estado y de Gobierno de los 27 deberán aprobar por unanimidad.

El brexit estaba previsto inicialmente para el próximo 29 de marzo. La extensión del Tratado sería, según ha advertido May, "corta y limitada", y debería procurarse que no se alargara hasta la fecha de celebración de las elecciones europeas que tendrán lugar el domingo 26 de mayo.

Tras las votaciones, May insistió en que abandonar UE sin un acuerdo el próximo 29 de marzo sigue siendo la opción legal "por defecto", si no se "acuerda otra cosa" antes de esa fecha. "Las opciones que están por delante son las que siempre hemos tenido", afirmó.

La Cámara de los Comunes evaluará este jueves otra cláusula en la que se propondrá que el Reino Unido solicite a Bruselas una extensión del plazo de salida.

La jefa del Gobierno británico detalló que si la cámara aprobara "en los próximos días" el acuerdo de salida, a pesar de que ya se ha rechazado en dos ocasiones, se podría solicitar "una corta extensión técnica". Si, por el contrario, el Parlamento mantiene su rechazo al tratado de salida que Londres y Bruselas sellaron en noviembre, sería necesaria una "extensión mucho más larga".