Las hijas de Araceli García están desoladas. Ayer incineraron a su madre después de haber permanecido más de un mes agonizando en el hospital Clínico.

Araceli, una profesora separada de 59 años, ingresó en el centro sanitario tras romperse una pierna (tibia y peroné) en una caída y nunca más volvió a dar clase. El motivo, según hizo público ayer la Asociación El Defensor del Paciente, fue que "contrajo una infección hospitalaria". Ahora sus hijas han interpuesto una denuncia contra el Clínico por presunta negligencia médica. El hospital, por su parte, niega que se haya producido una infección y asegura que "la paciente tuvo los controles regulares" y que fue "atendida con normalidad".

Inmediatamente fue trasladada al 12 de Octubre, su centro de referencia. "Nos dijeron que había que operarla, pero que como no era urgente, la iban a trasladar al Clínico". Allí empezó su calvario. Ese mismo día la intervinieron y 48 horas después la bajaron a la UCI por una complicación. "Al principio nos dijeron que había empeorado por un fármaco o un virus de quirófano".

Problemas para orinar

A partir de ese momento, la paciente empezó a tener problemas para orinar, tras lo cual sufrió una insuficiencia hepática fulminante. Sobrevivió a ella, pero permaneció sedada y con diálisis en la UCI más de dos semanas. Tras una ligera mejoría, cogió "una neumonía". El 4 de febrero volvió a ser operada de la pierna porque la herida se había infectado. Una semana después, empeoró "por una bacteria de la UCI". Finalmente, el pasado martes, murió. Sus hijas solicitaron una autopsia que ha determinado que "murió por un shock séptico" [una infección generalizada].

Ayer, al mediodía, Cristina y su hermana incineraron a su madre.