El hombre había sido denunciado días atrás por un episodio de violencia de género y acudía a una cita con los policías para recoger sus enseres personales del domicilio. Al llegar conduciendo, los agentes comprobaron que presentaba gran nerviosismo, mostrando una actitud alterada mientras conversaba con ellos, según ha informado la Policía Foral en una nota.

Por este motivo, decidieron someterle a las pruebas de detección de drogas, en las que arrojó positivo en todas las sustancias que detecta el test (cannabis, anfetaminas/metanfetaminas, cocaína y opiáceos).

Todo ello supone una denuncia de 1.000 euros, retirada de seis puntos e inmovilización del vehículo.

Se da la circunstancia de que pocos días antes también fue sorprendido circulando habiendo consumido sustancias estupefacientes.