Las obras que conectarán las estaciones de Metro de Gran Vía y Sol podrían retrasarse un par de meses, dado que se ha modificado el contrato para que se utilice maquinaria de menor envergadura, con el objetivo de evitar daños al patrimonio histórico, según ha informado el vicepresidente regional Pedro Rollán en una rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.
Rollán ha defendido que los trabajadores de Metro están "altamente cualificados" e intentarán ajustarse "en tiempo y forma" a las obras: "se cumplirá con las garantías de seguridad y lógicamente con el cuidado y la precuación que se tiene que tener por si apareciera algún elemento a preservar".
También, ha indicado que, hasta el momento, sólo han aparecido algunos espacios donde se albergan elementos históricos, que fueron "lamentablemente destruidos en la década de los 70" y algunas vasijas, cerámicas y una barandilla, que el Ejecutivo pretende restaurar y exponer posteriormente.
Asegura que la Comunidad es conocedora de "la importancia de estas obras" que permitirán conectar Gran Vía con Sol y "aliviar la presión" que existe en la primera estación en algunas fechas señaladas.
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