La Alhambra ha estado cobrando indebidamente a sus visitantes la subida anual en sus diferentes tipos de entradas durante 46 días. El monumento nazarí empezó a aplicar los nuevos precios el pasado 1 de enero, un mes y medio antes de que la revisión de las tarifas saliera publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), tal y como establece la ley.

Al ser un precio público, como los del autobús o el servicio de taxi, la Alhambra está obligada a esperar a que las nuevas tasas salgan publicadas en el boletín oficial antes de empezar a cobrar los nuevos precios.

La entrada normal se ha encarecido un 20%, de 10 a 12 euros, y la de jubilados un 28%, de 7 a 9 euros. Sin embargo, ninguna subida debería haberse hecho efectiva hasta el pasado sábado, un día después de que la orden apareciera en el BOJA.

Los 160.000 visitantes que aproximadamente ha recibido el monumento nazarí en ese primer mes y medio del año han supuesto para el Patronato de la Alhambra unos ingresos extra superiores a los 300.000 euros.

Según José Carlos Cutiño, responsable del servicio jurídico de la Unión de Consumidores de Andalucía (UCA), al aplicar la tarifa antes de lo legal, la Alhambra ha realizado un cobro «indebido» durante este tiempo que los visitantes pueden reclamar al monumento. Quienes decidan hacerlo deberán presentar ante el Patronato una copia de su entrada y la referencia al BOJA con la fecha en que debería haberse hecho efectivo ese precio.

Por correo certificado La Unión de Consumidores de Andalucía (UCA) recomienda a quienes quieran reclamar el dinero cobrado de más en este tipo de casos que lo hagan directamente ante el organismo en cuestión. En su defecto, aconseja