La Nueva Red de Bus de Barcelona, que se empezó a implantar en 2012 y ofrece más frecuencia que la convencional con más vehículos y recorridos más rectos, pero también a base de obligar a hacer más transbordos, estará acabada el próximo lunes 26 de noviembre. Ese día se pondrán en marcha las últimas cinco líneas que quedan para completarla -H2, V1, V19, V23 y V25-, que según las previsiones del Ayuntamiento, absorberán el 60% de los usuarios de los autobuses de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) en días laborables, 460.000.

Lo ha anunciado este martes la concejal de Movilidad y presidenta de TMB, Mercedes Vidal, que ha dicho que una vez finalizado su despliegue, la nueva red contará con un total de 28 líneas y 97 áreas de intercambio y que la puesta en funcionamiento de la H2, la V1, la V19, la V23 y la V25 supondrá la desaparición de dos líneas tradicionales, la 45 y la 92, y la modificación del recorrido de otras cinco (39, 47, 54, 55 y 60). Además, se harán ajustes en la H6, la H8, la H10 y la V13, que pertenecen al nuevo servicio.

"Es un proyecto altamente complejo que ha contado con un acuerdo político de primer orden y la mayor reorganización del transporte en superficie que se ha hecho en Barcelona", ha señalado Vidal, que ha asegurado que en el gobierno municipal están "muy orgullosos" de los resultados.

También ha dicho que por primera vez en todo el proceso de modificación del servicio de autobuses, en esta última fase de implantación de los nuevos se incorporarán 66 vehículos, que no solo se destinarán a la nueva red, sino que también servirán para reforzar las líneas de proximidad 13, 91 y 97 y para la puesta en marcha de los futuros buses de barrio 133 y 135.

Las cinco líneas de la Nueva Red de Bus que se pondrán en funcionamiento tendrán una frecuencia de unos ocho minutos de las 7 a las 21 horas en días laborables y una de ellas hara un recorrido de este a oeste y al contrario (H2), mientras que el resto circularán de norte a sur y al revés.

La H2, con una longitud de 25,5 kilómetros, unirá la avenida de Esplugues y Trinitat Nova. Tendrá como referencia la actual 60, que se modificará y contará con nuevo origen y final en Vall d'Hebron. La V1, con 14,1 kilómetros, circulará entre Gran Via L'Hospitalet y la avenida de Esplugues. Se basará en la 54, que también cambiará y tendrá una limitación de recorrido hasta Cardenal Reig. En cuanto a la V19, irá de Barceloneta a la plaza Alfonso Comín y al contrario. Tendrá 25,4 kilómetros y como referencia, la 92, la 39 y la 55. La primera se eliminará, mientras que los recorridos de las otras dos se harán más cortos. La longitud de la V23 será de 19,5 kilómetros y esta unirá Nova Icària con Can Marcet y se basará en la 39 y la 92. Y por último, estará la V25, entre nova Icària y Horta, con 16,3 kilómetros y basada, asimismo, en la 92 y la 45, que también desaparecerá.

A partir del lunes 19 de noviembre, para que los ciudadanos a quienes les cojan desprevenidos los cambios previstos para el día 26 sean los mínimos, se pondrá a trabajar un equipo de 170 informadores -entre ellos 20 exempleados jubilados de TMB-, el mayor que se habrá desplegado en todas las fases de activación de estos últimos autobuses de altas prestaciones. Se les podrá encontrar en vehículos, paradas, intercambiadores, centros de personas mayores, hospitales y zonas escolares y formarán parte de una campaña informativa que se iniciará el día 12. Esta incluirá también, entre otros elementos, un simulador de rutas de los futuros recorridos a través de la aplicación municipal Vull Anar y un refuerzo de la atención a través del teléfono 010 y del de TMB.

Una vez la Nova Xarxa de Bus esté lista, en Barcelona habrá las 28 líneas que la integrarán, más 44 convencionales y 27 de proximidad y de barrio.

La concejal de Movilidad ha descartado poner en marcha una línea de la nueva red que recorra toda la Diagonal, porque por la avenida "ya circulan cerca de 70 buses por hora y es difícil incluir uno más".

"Lo que hace falta es un salto de escala que el tranvía nos hubiera dado", ha dicho, y ha apuntado que la "apuesta" por alargar el recorrido de este medio de transporte por esta arteria "sigue vigente" y que espera que "en un futuro haya un clima político que lo posibilite".