Escrita por José García Castillo y actualizada por el cónsul honorario de Portugal en la provincia, Rafael Pérez Peña, la obra "reivindica el papel de los cónsules y su encomiable labor basada en la integridad de las personas y la asistencia de sus necesidades", según ha explicado la diputada de Economía y vicepresidenta tercera de la Diputación de Málaga, Kika Caracuel, durante el acto de presentación del libro que ha tenido lugar este miércoles en el Rectorado de la Universidad de Málaga.

La aportación de la Diputación tiene el objetivo de "contribuir a que Rafael Pérez Peña concluyera la historia de la institución consular en Málaga actualizando su contenido desde 2003 hasta nuestros días, rindiendo así también un merecido reconocimiento a José García Castillo, antiguo decano del Cuerpo Consular y hoy cónsul emérito y que sentirá una inmensa alegría al ver su gran obra concluida", ha detallado Caracuel.

La diputada ha felicitado durante el acto, -en el que han estado presentes también el vicerrector de Política Internacional, Juan Antonio García Galindo y Rafael Pérez Peña-, a este último por su "brillante actualización del libro".

También se ha referido al Consulado de Málaga por su labor en la captación de inversiones para la provincia "como se comprobó en el Interex Forum", un foro diplomático y empresarial que reunió a los cónsules de 39 países con el objetivo de ayudar la internacionalización de las empresas malagueñas, pero también, a la captación de capital extranjero en la provincia.

La diputada ha destacado la importancia de la obra teniendo en cuenta que "la historia de los últimos siglos de Málaga, de su provincia, no se entendería sin esa relación, sin esa complicidad entre el cuerpo consular y los malagueños".

Se trata de la primera y única aportación historiográfica sobre los cónsules y consulados en Málaga, con cronología y abundante documentación que abarcan cuatro siglos de relación estrecha entre la representación de sesenta países y la vida de Málaga, ha apuntado.

En ella se demuestra una "ancestral" interrelación económica, turística, comercial, cultural y diplomática con el cuerpo consular como lo explica primero García Castillo y ahora Pérez Peña, "diseccionando con maestría esa historia que ayuda también a conocer Málaga y cómo esta ciudad siempre ha sido una pionera a la hora de establecer negocios, abrir fronteras y acoger a decenas de nacionalidades".

Caracuel ha asegurado que gracias a esta obra conocemos que el origen de la institución consular se remonta a muchos siglos antes de la aparición de la Diplomacia permanente y tuvo un origen comercial y marítimo hasta que luego tomó un carácter más político al elegir las naciones a sus representantes, separando la diplomacia de la acción consular.

Después evolucionó hasta que en 1643 nació la Institución Consular de Málaga para dar respuesta principalmente a la importante y notable colonia extranjera entre estable y transeúnte que había en Málaga y para dar cobertura al constante nombramiento de cónsules honorarios en extranjeros residentes y españoles pertenecientes a la clase mercantil debido a la gran actividad del puerto malagueño.

Por su parte, Rafael Pérez Peña, cónsul honorario de Portugal en Málaga, agradeció al presidente de Turismo Costa del Sol, Elías Bendodo, durante el acto de presentación del libro, el apoyo de la entidad a este proyecto que ha contribuido a que la realización de esta obra fuese posible.