Las asociaciones de jueces y fiscales han mostrado este lunes su rechazo ante las declaraciones realizadas por Carmen Calvo, vicepresidenta del Gobierno, en una entrevista sobre los líderes independentistas catalanes. A su vez, han hecho un llamamiento al respeto a la separación de poderes y a la independencia judicial.

En una entrevista concedida a La Vanguardia el pasado domingo, la ministra declaró que si se retrasa el juicio contra los políticos independentistas "no sería lógico alargar la prisión preventiva", situación en la que se encuentran algunos de ellos.

Algunas de las asociaciones judiciales y fiscales han calificado este tipo de opiniones por parte de un miembro del Ejecutivo es un acto "irresponsable", ya que supone una injerencia en el Poder Judicial. A su vez, recuerdan que el tiempo de la prisión preventiva figura en la Ley de Enjuiciamiento Criminal y que compete a las acusaciones hacer las peticiones oportunas al juez instructor o tribunal.

El presidente de la Asociación Judicial Francisco de Vitoria, Raimundo Prado, afirma que "es de una irresponsabilidad absoluta y da la sensación que la finalidad es presionar a los jueces incumpliendo todas las reglas del Estado de Derecho".

La portavoz de Foro Judicial Independiente (FJI), Concepción Rodríguez, ha recordado que ya se han dado "varias manifestaciones" por parte de "varios miembros del Gobierno" sobre este asunto que aún continúa en proceso, y por ello considera que son "muy censurables porque es una intromisión".

Para el portavoz de la Asociación Profesional Independiente de Fiscales (APIF), Miguel Pallarés, este tipo de manifestaciones "pueden confundir un poco a la opinión pública" porque pueda dar entender que "hay algún tipo de relación entre el Poder Ejecutivo y el Poder Judicial" y que se pueda decir que "todo lo controla" el Gobierno.

Por último, la presidenta de la Asociación de Fiscales (AF) —la mayoritaria— ha enfatizado que "los políticos tienen que hacer política y tienen que dejar trabajar a los fiscales y a los jueces en lo que tienen entre manos". "No es serio" porque son unas "afirmaciones que están en el ámbito de la política pero que, desde luego, jurídicamente no", ha concluido.