La investigación policial de la Comisaría de Úbeda ha puesto de manifiesto que los detenidos detectaron la presencia del menor en la estación de autobuses de Málaga, donde se pusieron en contacto con él y les manifestó que acababa de llegar a España oculto en los bajos de un camión que partió en barco del puerto de Melilla.

Los detenidos aprovecharon la situación de desamparo del menor para pedirle el teléfono de sus padres en Marruecos y de esa forma comunicarles que había llegado a la península y que se encontraba bien. Los hombres se pusieron en contacto telefónico con los familiares, informándoles de que tenían a su hijo secuestrado y para su liberación les exigían una cantidad de dinero.

Los padres respondieron que no podían hacerse cargo del rescate y mucho menos desde su país, por lo que les facilitaron un número de teléfono de un amigo suyo para que se pusieran en contacto y llegasen a un acuerdo, por lo que acordaron trasladarse a Úbeda donde se produciría el intercambio del menor, previo pago del dinero del rescate.

Tras una compleja operación se procedió a la liberación de la víctima, que ha ingresado en un centro de atención de menores, y a la detención de los secuestradores, que han ingresado en prisión después de pasar a disposición judicial.

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