Agentes de Policía Foral adscritos a la comisaría de Sangüesa analizan los fallos de seguridad que se han producido esta mañana en el encierro de toros de la localidad, y que ha generado momentos de peligro entre los participantes, según ha informado la Policía Foral.
El encierro transcurría con normalidad hasta que los astados han entrado en la plaza. Sin embargo, la puerta de acceso a la misma no se ha cerrado completamente y los animales en lugar de acceder a los toriles han dado la vuelta y han salido de nuevo al recorrido. En ese momento ha comenzado la carrera en sentido contrario hasta los corralillos, produciéndose momentos de tensión y peligro entre los corredores.
Una vez que los toros han llegado hasta los corralillos, se ha vuelto a establecer el dispositivo policial, sanitario y de pastores y tras unos minutos se ha vuelto a realizar otro encierro, que esta vez ha transcurrido sin novedad.
Policía Foral investiga las causas de que no se haya cerrado inicialmente la puerta de acceso a la plaza para determinar si se ha podido producir algún tipo de negligencia por parte del personal encargado de hacerlo.
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