Con esta técnica de toma de muestras de la próstata, los especialistas de Mesa del Castillo consiguen localizar y dimensionar la zona afectada para que la posterior intervención, ya sea a través de cirugía o radioterapia, sea lo más acertada posible causando así las mínimas secuelas con un resultado favorable, según informaron fuentes del centro sanitario en un comunicado.

El facultativo encargado de realizar la primera intervención en el hospital murciano el pasado 4 de junio fue el doctor Antonio Rosino, quien ha señalado que "un ecógrafo de alta gama permite fusionar imágenes de la resonancia magnética con las imágenes de la ecografía transrectal que visualizamos en quirófano en el momento de la toma de muestras, lo que proporciona una mayor precisión en la localización del tumor".

Los resultados de la biopsia realizada por el doctor Rosino y su equipo saldrán próximamente y facilitarán información precisa acerca de la ubicación de la zona afectada por el tumor. Una vez localizada la lesión, el tratamiento se hará de forma dirigida causando las mínimas secuelas y una recuperación óptima del paciente.

BiopSee es el ecógrafo de última generación desarrollado por Hitachi que ha permitido un avance significativo en el diagnóstico del cáncer de próstata. La tecnología facilita la utilización de la imagen de RMN, donde previamente ha sido localizado el tumor, durante la ecografía transrectal.

Ambas imágenes son fusionadas para su visualización a la vez. El resultado es una imagen tridimensional a tiempo real de la próstata y el tumor, por lo que la toma de muestras para la biopsia se lleva a cabo con total exactitud.

Cada año se diagnostican en nuestro país más de 25.000 nuevos casos de cáncer de próstata, el de mayor incidencia entre la población masculina. Aunque la tasa de supervivencia de esta patología es cercana al 1oo%, sus secuelas, la disfunción sexual y la incontinencia urinaria, reducen considerablemente la calidad de vida de los pacientes. Gracias a la tecnología que incorpora Mesa del Castillo, las secuelas se reducen al mínimo necesario ya que la zona afectada está perfectamente localizada.