Previsiblemente, los interesados podrán solicitar ya en septiembre este permiso, que podrán disfrutar desde que nazca el niño hasta el fin de la baja por maternidad (16 semanas –diez de ellas compartibles con el padre–) más los diez días del permiso, aunque esta última cuestión aún está por perfilar.
Los padres siguen, asimismo, teniendo derecho a tres días libres tras el nacimiento de un hijo y a la posibilidad de repartirse con la madre las diez últimas semanas de la baja por maternidad (el llamado ahora permiso de paternidad), en virtud de la ley para la conciliación de la vida familiar y laboral (1999).
El Gobierno presentó la semana pasada la propuesta a los sindicatos, que vienen reclamando hace largo tiempo un permiso de paternidad independiente al de la madre. Si bien aprueban la idea,
CC OO apostará por que el permiso se extienda hasta las cuatro semanas y UGT también pedirá que sea más largo.
Los funcionarios catalanes son hasta ahora los únicos que tienen derecho a un permiso de paternidad de cuatro semanas consecutivas a disfrutar desde la finalización del de la madre. Pueden también reducir un tercio su jornada con su salario íntegro hasta que el menor tenga un año.
Acumular horas de lactancia
El Ejecutivo se propone también dar la opción a las funcionarias de la Administración General del Estado de que acumulen sus horas de lactancia (una al día) para poder canjearlas por jornadas completas. Este permiso también puede disfrutarlo el padre. De hecho, la Audiencia Nacional consideró el año pasado que es legal que un convenio colectivo permita a los padres acumular en un mes de permiso retribuido los permisos de lactancia, ya que «amplía las posibilidades a las que los padres pueden optar para el mejor cuidado de los hijos».
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