Este martes se ha presentado, después de días de adelantos, el Plan Inmobiliario del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, un proyecto con el que se pretende consolidar a este complejo como un "aeropuerto de referencia internacional", en palabras del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna.

Para cumplir ese objetivo, el ministerio ha planteado un ambicioso plan que durará hasta 40 años y que tendrá una inversión público-privada de 2.997 millones de euros.

Los nuevos recintos abarcarán un espacio de 920 hectáreas de suelos potenciales -una superficie 4 veces más grande que el proyecto Madrid Nuevo Norte-, que ocuparan 2,7 millones de metros cuadrados edificables, según destacó De la Serna en una presentación en la T4 de Barajas.

El proyecto inmobiliario se basará en tres ejes, un nodo logístico, un hub empresarial global y un gran despliegue de servicios a los pasajeros. Para ello, el proyecto se dividirá en cuatro usos de suelo: actividades aeronáuticas, un polo logístico, el llamado Airport City (con usos de servicio al pasajero y de oficinas) y centro de ocio y actividad comercial.

La primera fase de este macroproyecto abarcará 8 años y en ella se pretende invertir 953 millones de euros en construcciones de más de 550.000 metros cuadrados. De la Serna ha apuntado que las obras se iniciarán en 2019 y en 2020 ya estarán disponibles los primeros edificios.

El titular de Fomento ha asegurado que "algunas empresas importantes" ya han mostrado su interés en ubicar sus sedes en España en estos nuevos recintos. Se espera que en el próximo Consejo de Ministros se apruebe el Plan para comenzar a diseñar la estructura societaria que sustente estas obras.