En su catálogo figura desde una pluma Graf Von Faber-Castell de ébano y márfil de mamut de Siberia por 2.400 euros (que un empresario alicantino regaló al presidente de Rumanía, Traian Basescu), a la actual pluma Marlenne Dietrich de Montblanc, la más cara, con plata maciza y un cinturón de 16 brillantes, en venta por 3.400 euros.

Y también, Tauromaquia de Omas, de plata maciza lacada y asta de toro, al precio más asequible de 1.150 euros. O una bellísima creación de Faber-Castell, con madera fosilizada de Brasil sobre platino, por 2.500 euros.

O una Parker de hace 50 años, hecha de raya, con la que los samurais cubrían sus espadas. «Las compran coleccionistas y para regalos de grandes empresas», afirma el gerente, José Antonio Megías, esposo de Elena Pérez, socia junto a sus hermanos Silvia y Rubén, y jefa de su hijo Iván y de Virginia Lapeña.