Es el argumento de la jueza del Tribunal Supremo, Teresa Palacio, para archivar el caso Botín, y que ahora podría despejar el juicio contra el lehendakari Ibarretxe y los dirigentes socialistas Patxi López y Rodolfo Ares, a quienes el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha abierto juicio oral por hablar con Batasuna durante el alto el fuego de ETA.

Al igual que en el juicio contra el presidente del Banco Santander, en el caso Ibarretxe sólo hay acusación popular, ejercida por las asociaciones Dignidad y Justicia y el Foro de Ermua.

Este último colectivo, tras conocer la posibilidad, anunció ayer que si el TSJPV sobresee la causa contra el lehendakari, recurrirá al Tribunal Constitucional. La defensa de Ibarretxe, de hecho, ya planteó como cuestión previa al TSJPV que aplique la doctrina que ayer confirmó el Tribunal Supremo y archive la causa contra el lehendakari.

Indicios racionales

El Tribunal Superior vasco estimó entonces que bastaba con las imputaciones de la acusación popular. El magistrado que instruye la causa, de hecho, aseguró que existen indicios racionales para la celebración de la vista oral. El Gobierno vasco, por su parte, consideró que todo ello demuestra que en el juicio contra el lehendakari existe un impulso político.

Pero deberá ser el alto Tribunal vasco el que tome la decisión. Según fuentes judiciales, el TSJPV decidirá si sobresee la causa o sigue adelante con ella el mismo día en el que se inicie el juicio contra Ibarretxe.

Será en ese momento cuando las defensas plantarán como cuestiones previas la petición de archivar la causa. Para ello, según han anunciado, esgrimirán lo sucedido con el caso Botín.