El pasado mes de mayo la Fundación BBVA ponía en marcha la serie expositiva Multiverso, un programa que ha presentado hasta la fecha trabajos de Txuspo Poyo, Rosana Antolí y Marc Larré y arranca este mes su nueva temporada 2017-2018 con la videocreación The Wolf Motives/Los motivos del lobo de Carles Congost (Olot, Gerona, 1970).
Disponible para su visionado entre el 8 de septiembre y hasta el próximo 8 de octubre en el madrileño Palacio del Marqués de Salamanca, esta pieza de 17 minutos hace hincapié en las estrategias de control que, de manera más o menos velada, se construyen en torno a los jóvenes.
El artista catalán, que desde que inició su carrera con el nuevo milenio siempre ha sido fiel a referencias del pop, el universo adolescente y la cultura de masas; pone el foco en esta ocasión en los intereses de mercado que se esconden detrás de los incentivos que marcas y corporaciones lanzan a través de redes sociales y canales especializados a la juventud.
Congost utiliza esta videocreación para señalar como las marcas aprovechan esta etapa de construcción de identidad e imagen de los jóvenes para crear un sistema alienante que les indica lo que les debe gustar o a qué grupos deben pertenecer. De esta manera The Wolf Motives se presentar como un falso documental de vida animal, que atribuye características animales a una pequeña comunidad de jóvenes, mostrando a la vez los mecanismos de control y sobreprotección organizados en torno a sus hábitos y formas de vida.
Identidad y conflictos generacionales
Licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona, entre sus últimos galardones están el Premio Ciutat de palma de Artes Visuales Antoni Gelabert con la obra The Artist Behind the Aura (2014) y la segunda edición del Premio de Videocreació de la Xarxa y Loop con el vídeo Wonders (2016). Ese mismo año fue invitado a producir una obra para la edición 11 de la bienal europea Manifesta.
Ha realizado muestras individuales en la Fundació Miró, el Museo Reina Sofía o el Centre d' Art Santa Mònica y participado en colectivas en espacios como el MOMA de Nueva York, el Palais de Tokyo de París o en Hamburger Bahnhof de Berlín.
Su trabajo, para el que ha combinado diferentes soportes como el vídeo, la música, el dibujo y la fotografía, se ha interesado siempre por fenómenos relacionados con los jóvenes como la construcción de la identidad o los conflictos generacionales.
Tras la exposición dedicada al artista catalán, la Sala Multiverso acogerá los trabajos Mater Amatísima, de María Ruido; El accidente de Vollard, de Pedro Luis Cembranos; La España profunda, de Isaías Griñolo; Global Windshield, The Musical, de Momu & No Es, y Shelter, de Lúa Coderch.
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