Un operario ha muerto este martes por la tarde en una gasolinera de Sant Sadurní d'Anoia (Barcelona) al producirse una deflagración cuando se estaban llevando a cabo labores de mantenimiento de la instalación. Otro trabajador ha sido rescatado y está muy grave.

Según han informado los Mossos d'Esquadra, el siniestro se ha producido cuando pasaban cinco minutos de las tres y cuarto de la tarde cuando se estaban haciendo tareas de limpieza en un depósito subterráneo de una gasolinera, situada en la carretera de Sant Quintí de Mediona.

Al principio se informó que eran dos los muertos en el suceso. Pero los Bomberos de la Generalitat han rescatado con vida, aunque en estado muy grave. Los equipos de emergencia habían dado por muertos a ambos operarios dado que, tras la deflagración ninguno de ellos daba señales de vida ni contestaba a las llamadas de los sanitarios.

Sin embargo, los equipos especializados del GRAE de los Bomberos de la Generalitat desplazados al lugar del accidente han logrado finalmente rescatar con vida a uno de los dos operarios, que ha sido trasladado en estado grave al Hospital Vall d'Hebron de Barcelona con heridas en varias partes del cuerpo.

El otro operario, sin embargo, ha sido evacuado ya cadáver del depósito de la gasolinera donde ha ocurrido la deflagración, cuyas causas se están aún investigando.

La deflagración ha derivado en un pequeño incendio que ha generado una intensa humareda y que ya ha sido controlado por los Bomberos, que han desplazado al lugar del suceso a nueve dotaciones terrestres y han acordonado el recinto ante el riesgo de que pueda haber otros productos tóxicos o inflamables afectados por la deflagración.

El Ayuntamiento de Sant Sadurní ha hecho un llamamiento a los ciudadanos para que no se aproximen al lugar del siniestro ni a pie ni en coche.

La gasolinera donde ha ocurrido el siniestro está situada en una carretera que comunica Sant Sadurní con Sant Quintí.