La Comisión de Asuntos Exteriores, Defensa Nacional y Asuntos Islámicos de la Cámara de Representantes de Marruecos convocó hoy una protesta de sus miembros ante la Embajada de España para el lunes por la mañana, según un comunicado oficial.

Los diputados tienen intención de organizar una sentada ante la legación diplomática española el mismo día en que comienza la visita de los Reyes a Ceuta y Melilla , según el comunicado, para "expresar su indignación" por ese desplazamiento y para "hacer un llamamiento a las autoridades españolas para que renuncien a sus posiciones".

La Comisión, que preside el diputado Fuad Ali El Himma (el anterior ministro delegado de Interior), aprobó una declaración en la que además se rechaza "vigorosamente" la visita de los Reyes de España a las ciudades autónomas y se subraya "por unanimidad" la necesidad de "revisar las relaciones marroquí-españolas".

Ciudades ocupadas

El comunicado de la Comisión parlamentaria fue también emitido por la segunda cadena de la televisión pública marroquí y en él se advierte de "las repercusiones negativas que podrían resultar de esta visita, que constituye un acto de provocación en relación con la soberanía marroquí y dirigido al pueblo marroquí y que pretende normalizar la ocupación".

Las autoridades marroquíes consideran que las ciudades de Ceuta y Melilla, que los Reyes visitarán oficialmente por primera vez los días 5 y 6 de noviembre, son "ocupadas" por España.

"Esta visita podría perjudicar gravemente los intereses comunes y el clima positivo que ha marcado las relaciones marroquí-españolas en los últimos años en sus diferentes aspectos y prolongaciones euromediterráneas", continúa el comunicado.

Integridad territorial

Además, los miembros de la Comisión "invitan al Gobierno y al Parlamento" marroquíes "a tomar, frente a esta situación, todas las medidas e iniciativas necesarias a la altura del descontento del pueblo marroquí ante esta visita lamentable e inoportuna".

En el comunicado se señala que la visita de los Reyes de España a Ceuta y Melilla es "una profunda provocación al pueblo marroquí, apegado a la integridad territorial de su país".

Todos los grupos parlamentarios de la Cámara de Representantes, según el comunicado de la Comisión, muestran su apoyo a la posición de las autoridades marroquíes en esta cuestión y, en particular, a la "decisión de Su Majestad el Rey Mohamed VI de llamar a consultas" al embajador en Madrid.