El presentador y cómico estadounidense Jimmy Kimmel es el responsable de presentar la gala de los premios Óscar en su edición número 89, y no ha tenido ningún problema en adelantar el dinero que implica.

El futuro maestro de ceremonias de Hollywood explicó en el programa de radio Kevin & Bean que ganará 15.000 dólares (unos 14.300 euros) por ponerse al frente del auditorio, tal y como recoge el diario La Vanguardia.

"Creo que sería ilegal no pagar nada", bromeó durante el espacio. "No estoy seguro de poder revelarlo, pero nadie me ha dicho que no lo haga, así que considero que es culpa suya", continuó.

Aunque en principio parezca un sueldo elevado, hay que tener en cuenta la preparación que hay detrás de la gala: meses de ensayos y pruebas, sumados a una gran responsabilidad.

El presentador, que normalmente cubría en su programa la difusión de los Óscar con un especial, desveló durante la misma entrevista que él no era la primera opción para conducir la gala: "Preguntaron como a 14 personas, y todos dijeron que no. Luego estaba yo", comenta.

Jimmy Kimmel ya había bromeado con su elección como responsable. "Los productores y la Academia agotaron la larga lista de nombres", comentó en su día, "y al final decidieron que, ya que estoy al otro lado de la calle, yo era la persona más adecuada para presentarlo".