El House Café, a día de hoy, se ha convertido en el mayor de los problemas de la pareja y en el causante de un cruce de acusaciones y constantes discusiones. Ninguno de ellos consigue cumplir el sueño con el que llegaron al restaurante y, si nadie lo remedia, el negocio no superará su peor momento.
UN CAOS DE NEGOCIO, UNA PLANTILLA INEXPERTA
Tras una primera ojeada al restaurante, a sus dueños y a los miembros de su equipo, Alberto Chicote descubrirá a una pareja desgastada y sin comunicación, para la que el carácter terco de él resulta cada día un escollo mayor.
Fruto de las órdenes cruzadas de los dueños y de la falta de entendimiento, el caos se ha instalado en el restaurante y la plantilla, joven e inexperta, aprovecha en ocasiones sus horas de trabajo para flirtear, beber algún que otro chupito y desatender el servicio.
El House Café será una dura prueba de paciencia para el chef Chicote, que no dudará en quedarse a dormir en el particular camping que acoge al restaurante para valorar debidamente el establecimiento en su conjunto e intentar encontrar las causas del problema que asola ambos negocios.
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