Los internos del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche, en Madrid, han interrumpido la huelga de hambre que comenzaron hace dos días a la espera de que este lunes puedan hablar con un juez.

Fuentes policiales han confirmado que el sábado todos los internos cenaron y que este domingo han desayunado y comido en un clima de normalidad, sin incidentes, que es la tónica en el centro desde la víspera.

La ONG Sos Racismo ha relatado que los internos del CIE han suspendido hasta el martes su huelga de hambre después que el jefe de seguridad les aseguró que mañana, lunes, tendrán acceso a hablar con un juez. Según ha precisado una portavoz de la ONG, sólo uno de los internos participantes en la protesta "se encontraba mal" como consecuencia del tiempo transcurrido sin ingerir alimentos.

En la noche del pasado martes, unos cuarenta internos del CIE de Aluche se amotinaron en la azotea del edificio en una protesta que terminó de forma voluntaria al día siguiente tras negociaciones que mantuvieron con la Policía.

Diversas organizaciones informaron de que algunos internos denunciaron malos tratos y actitudes degradantes por parte de la Policía una vez terminado el motín, tanto a personas que participaron en él como a otros internos que no se habían sumado a la protesta.

Sos Racismo, ha dicho la portavoz, está "pendiente" de forma ininterrumpida "de lo que pueda pasar" con las personas ingresadas en el CIE y "preocupada por el hecho de que los internos puedan ser expulsados de España sin que se investiguen antes los hechos" acaecidos la semana pasada.