Tras una primera jornada que solo sirvió para constatar el actual bloqueo político e institucional, el rey ha retomado este miércoles las consultas políticas para buscar candidato a la investidura, tal y como estable la Constitución. El primero en ser recibido hoy en el Palacio de la Zarzuela ha sido Aitor Esteban, portavoz del PNV en el Congreso, que ha trasladado a Felipe VI que "no habrá acuerdo alguno con el PP" y que votará en contra de la investidura de su candidato, Mariano Rajoy, "si es que se presenta", tanto en primera como en segunda instancia.

Según Esteban, que no ha descartado la posibilidad de una repetición electoral, no puede haber ningún acuerdo con este partido tras "las relaciones de estos cuatro años" entre ambas formaciones. A su juicio, el Gobierno de Rajoy ha "ignorado" al Gobierno vasco, "presentando una pléyade de recursos contra leyes vascas" y llevando a cabo "políticas de recentralización". " No se trata de negociar una competencia que ya nos corresponde por el Estatuto vasco, sino de un cambio de actitud y de las relaciones, y eso no se consigue en dos días", ha afirmado.

El portavoz del PNV ha arremetido contra el PSOE por insinuar afinidad ideológica con los populares, y ha instado a los socialistas a que "asuman su responsabilidad" ya que, a su juicio, son ellos los que tienen "la llave". "Que no se escaqueen", ha subrayado, muy molesto por el hecho de que desde el PSOE se apuntara a a un posible pacto entre PNV y PP para la Mesa del Congreso. En ese sentido, ha calificado la cesión de senadores populares a su partido para que tenga grupo propio en el Senado como mera "cortesía parlamentaria, nada más".

Esteban ha pedido al PSOE que deje de "presionar"a otras fuerzas, y a Podemos le ha exigido que "deje de intoxicar". Con todo, ha mostrado su disposición a hablar con ambas formaciones si construyeran una alternativa de izquierdas, aunque en su opinión ninguno está trabajando para ello. Dada la situación, Esteban no descarta que haya terceras elecciones.

Una hora más tarde que Aitor, a las 11.30, se ha reunido con el rey la representante de En Marea, Alexandra Fernández, que también ha trasladado al monarca su "rotundo no a un gobierno del Partido Popular". A su juicio, este partido "tiene una ecuación complicada para sumar apoyos", lo que ha achacado en parte a la corrupción y en parte a la forma en que el PP "ha gobernado estos cuatros años, a golpe de rodillo parlamentario y sin diálogo". En su opinión, es algo que "complica que cualquiera quiera visibilizar un apoyo" al PP.

Fernández ha explicado que Felipe VI le ha transmitido que "es imprescindible tratar de evitar como fuera" unas terceras elecciones, pero la representante de En Marea, al igual que Esteban (PNV), no ha descartado esta posibilidad. Para ella, Rajoy está demostrando ser "un candidato ni-ni, que ni dialoga, ni negocia ni es capaz de formar gobierno". Por eso, frente a su "inmovilismo", ha apostado por abrir la puerta a un gobierno alternativo de "fuerzas progresistas" y "nacionalistas", aunque para ello ha considerado que sería el PSOE quien tendría que "mover ficha".

Tras Fernández ha sido el turno de Francesc Homs, de Convergència (CDC), que ha coincidido con los anteriores en que, vista la evolución de los acontecimientos desde el 26-J, no descartaría que haya terceras elecciones, pues todos los candidatos "están en su madriguera y nadie sale a buscar acuerdos". Homs ha criticado "la incapacidad para ponerse de acuerdo" de los partidos políticos y "la sensación de que nadie se mueve" con el fin de facilitar una posible investidura. A su juicio, la opción de una nueva repetición electoral no es "buena, sino horrorosa", y le causa "pena e indignación".

El diputado catalán ha enfatizado que los ochos diputados de su grupo votarán "no" a Mariano Rajoy tanto en la primera como en la segunda votación del debate de investidura, si es que se celebra, algo que duda porque no ve "ni horizonte de investidura". Asimismo, ha descartado "del todo" participar en una "abstención colectiva" e insistió en que su partido estaría abierto a "hablar" si el PSOE da un paso al frente. Por otro lado, ha revelado que en la entrevista con el rey ambos han abordado "puntualmente" la votación del Parlament de Catalunya sobre las conclusiones del dictamen para un proceso unilateral de independencia.

Ya por la tarde Felipe VI ha recibido al portavoz de Compromís Joan Baldoví, que ha encontrado al rey muy preocupado "por el bloqueo de la situación" y  "por que el reloj no empiece a correr", en referencia al hecho de que, debido a las lagunas en la Constitución, los plazos para unas nuevas elecciones no empiezan a correr si nadie se presenta a la investidura. Ante esa tesitura, Baldoví señaló que Rajoy debe presentarse, y si no lo hace, "las fuerzas que vamos a decir no tenemos la obligación moral de proponer una alternativa". Una alternativa que, en su opinión, debe encabezar el PSOE, a quien pidió que no sea "el perro del hortelano". "Sabemos que es difícil", pero hay que intentarlo, ha dicho.

Después ha sido el turno del portavoz de En Comú Podem, Xavier Domènech, quien ha constatado la preocupación de Felipe VI ante la posibilidad de unas terceras elecciones o de que el "bloqueo político" impida que el cronómetro empiece a correr y arranquen los plazos para la investidura, algo no previsto en la Constitución.

Tras confirmar a Felipe VI que En Comú Podem no apoyará ni por activa ni por pasiva una investidura de Rajoy o de cualquier otro candidato del PP, Domènech también le ha trasmitido que si hay una alternativa de Gobierno con el PSOE estarán en ella. No obstante, ha admitido que esa alternativa parece estar lejos y es difícil en este momento, por lo que asume ya que su papel principal podrá estar en la oposición frente a un Ejecutivo del PP.

En Comú Podem ha criticado la actitud de Rajoy en las negociaciones de Gobierno que a su juicio está buscando la "pleitesía" y presionado con la amenaza de unas terceras elecciones para conseguir una mayoría en su investidura.

El monarca inició este martes la que es ya la cuarta ronda de contactos en siete meses para buscar al futuro inquilino de La Moncloa recibiendo a los diputados de Nueva Canarias, Pedro Quevedo; Foro Asturias, Isidro Martínez Oblanca, y Coalición Canaria, Ana Oramas, así como al presidente de Unión de Pueblo Navarro, Javier Esparza, y al coordinador federal de IU, Alberto Garzón. De todos ellos, sólo los socios electorales del PP en Asturias y en Navarra han trasladado al Rey su apoyo sin fisuras a Mariano Rajoy para la investidura.

Esta nueva ronda concluirá el jueves, cuando desfilen por Zarzuela los líderes de los cuatro grandes partidos. El presidente de Ciudadanos, Alberto Rivera, está convocado a las a las 10.30 horas, cita que aprovechará para pedir al rey que "convenza" al PSOE para que se abstenga en la votación a Rajoy para desbloquear la actual situación política y evitar así unas terceras elecciones, como él mismo ha avanzado.

A las 11.30 horas, será el turno del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, que reiterará al monarca su voto negativo al candidato 'popular', que es lo que también previsiblemente le traslade el líder de los socialistas, Pedro Sánchez, una hora más tarde. La ronda del Jefe del Estado, de la que se han descolgado de nuevo  los independentistas de ERC y EH Bildu, concluirá a las 17.00 horas con el presidente del Gobierno en funciones y aspirante a la reelección, Mariano Rajoy.

Completada la ronda de consultas, Felipe VI convocará a la presidenta del Congreso, la 'popular' Ana Pastor, para comunicarle si propone algún candidato para la sesión de investidura o si precisa de más tiempo. De haberlo, la fecha del Pleno es potestad de Pastor, aunque, en caso de que Rajoy reúna los apoyos necesarios, una de las fechas que el PP ha barajado es el 2 de agosto.

Sin embargo, Rajoy, cuyo partido ganó las elecciones, no cuenta por ahora con los apoyos necesarios para garantizar una investidura exitosa, pero hasta que este jueves no se reúna con el rey no se sabrá si se somete o no al debate que pondría en marcha los plazos constitucionales marcados para formar Gobierno antes de repetir los comicios.