Así, también acudieron el consejero delegado de Sodercan, Salvador Blanco, y la directora general de Universidades e Investigación del Gobierno de Cantabria, Marta Domingo, informa la UC.

El rector dio las bienvenida a los nuevos directores, "dos grandes investigadores", a los que les agradeció "aceptar una nueva responsabilidad nada fácil".

En la misma línea, el presidente del CSIC expresó su satisfacción "por haber cruzado la línea -les dijo- que separa la investigación, la innovación, para haceros cargo de su gestión.

Algo que Lora-Tamayo recomendó hacer a todos los investigadores "para comprobar la dificultades del otro nivel".

Rodrigo, reconocida investigadora en el ámbito de la física de partículas, dirige el grupo de investigación de Física de Altas Energías e Instrumentación en el IFCA.

Ha trabajado en laboratorios de Europa (CERN) y EEUU (Fermilab), desde donde ha participado en descubrimientos científicos como el del bosón de Higgs (2012) y el del quark Top (1995).

Su trabajo científico se ha desarrollado principalmente en experimentos de colisionadores de hadrones, donde ha realizado proyectos que van desde el análisis físico a la construcción de detectores de partículas.

Desde 1994 es miembro del experimento CMS del acelerador LHC del CERN. Es coautora de diversas publicaciones científicas y libros y miembro de diversos comités científicos nacionales e internacionales, entre ellos el de Política Científica del CERN, siendo la primera física española en formar parte de este organismo.

También es la primera mujer, tras Xavier Barcons, Luis Pesquera, Jesús Marco de Lucas, Francisco Matorras y Enrique Martínez, en ponerse al frente del IFCA

Por su parte, Piero Crespo es Licenciado en Ciencias Biológicas por la Universidad Autónoma de Madrid y Doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad de Cantabria. En 1992 se unió como becario Fulbright, al grupo de Silvio Gutkind en los National Institutes of Health (Bethesda, USA).

Volvió a España con un contrato de reincorporación a finales de 1996 y tras ganar la plaza de Científico Titular del CSIC en 1998, se estableció en el Instituto de Investigaciones Biomédicas de Madrid. En 2002 se trasladó a Santander, a la Unidad Asociada del IIB con la Universidad de Cantabria, embrión del IBBTEC, donde trabaja actualmente con el rango de Profesor de Investigación del CSIC.

Su trabajo se ha centrado fundamentalmente en el estudio de la regulación de la ruta Ras-ERK. En concreto, en cómo la sublocalización celular y la compartimentalización espacial de dichas señales, inciden en sus efectos bioquímicos y biológicos, tanto en contextos

fisiológicos como patológicos, en particular en cáncer.

Y en cómo tal regulación espacial puede explotarse en busca de nuevas terapias antitumorales. En la actualidad era el subdirector del IBBTEC, instituto que ahora pasa a dirigir.