El actor Wentworth Miller, que saltó a la fama por su papel de presidiario multitatuado en la serie Prison Break, y que ahora interpreta al Capitán Frío en las ficciones The Flash y Legends of Tomorrow, ha confesado en su cuenta de Facebook que sufrió una profunda depresión y una adicción a la comida durante una época de su vida posterior a Prison Break y criticó la burlas que su aumento de peso provocaron.

"Hoy me he encontrado como protagonista de un meme de Internet. No es la primera vez", decía el actor, que destacaba esa imagen sobre las demás que ha visto sobre él. "En 2010, casi retirado de la actuación, llevé una vida discreta por un buen número de razones", dice, y confiesa "la primera y principal: tenía pensamientos suicidas".

"En aquellos momentos lo sufría en silencio", explica, a pesar de que a posteriori ha hablado largo y tendido del tema. "Muy, muy pocas personas conocían la dimensión de mi lucha", dice, porque "avergonzado y dolorido, me consideraba un juguete roto".

Así, confiesa el actor que las "voces" de su cabeza le "impulsaban hacia un camino de autodestrucción", un sentimiento que ya conocía pues ha luchado "contra la depresión desde mi infancia".

"Recurrí a la comida. Podría haber sido cualquier otra cosa. Drogas. Alcohol. Sexo. Pero comer fue lo único que deseaba", explica el actor, lo que provocó su aumento de peso. "Hubo temporadas en las que el mejor momento de la semana era mi comida favorita y un nuevo episodio de Top Chef".

"Y aumenté de peso. Menudo puto problema", ironiza el actor sobre que se pusiera el foco en ese aspecto de su vida. "Un día, paseando por Los Ángeles con un amigo, nos cruzamos con un equipo de televisión grabando un reality. No me di cuenta de que había paparazzi por allí. Me sacaron unas fotos que fueron publicadas junto a otras de otros momentos de mi carrera. 'De cachas a gordo'. 'Michelines en forma'. Etc.", narra Wentworth Miller.

"Resumiendo, logré sobrevivir", destaca el actor, pero "también lo han hecho las fotos", cosa que asegura que le alegra. "Ahora, cuando me veo en esa foto con mi camiseta roja, una sonrisa extraña aparece en mi cara, me acuerdo de mi lucha. Mi resistencia y mi perseverancia ante toda clase de demonios. Algunos internos. Otros externos".

"Como un diente de león que crece entre el pavimento, sobrevivo", se enorgullece el intérprete, aunque no siempre fue así: "La primera vez que vi este meme en redes sociales reconozco que me costó respirar", pero ahora elige darle a esas fotos el valor de "la Fuerza. Curación. Perdón".

Y acaba su confesión animando a otros a superarse: "Si tú o algún conocido está luchando, hay ayuda disponible. Pídela. Manda un mensaje. Manda un e-mail. Llama por teléfono. Hay quien se preocupa. Están esperando para escucharte. Mucho amor".